Zapatero y Rajoy se reúnen en un clima de desconfianza mutua

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el líder del PP, Mariano Rajoy, mantendrán este lunes su octava reunión en el Palacio de la Moncloa, un encuentro marcado por el anuncio de ETA de romper su alto el fuego y por la desconfianza mutua tras meses de descalificaciones y reproches.

Mientras que Zapatero ya ha mostrado públicamente su pesimismo ante esta entrevista, convencido de que el PP hará oposición con la política antiterrorista “hasta el último día de la legislatura”, Rajoy ha señalado que acudirá a la Moncloa sin condiciones, aunque pedirá al jefe del Ejecutivo que impida que los concejales electos de ANV tomen posesión del cargo.

Esta exigencia será previsiblemente uno de los principales escollos del encuentro.

La vicepresidenta primera del Ejecutivo, María Teresa Fernández de la Vega, recordó el viernes que la política antiterrorista “la dirige el Gobierno, no la oposición”, y subrayó que ANV está “dentro de la ley” tras pasar “todos los filtros” que marca el Estado de Derecho.

De la Vega destacó que Zapatero pedirá a Rajoy “unidad, firmeza y lealtad”, como ha reiterado que él hizo cuando era el líder de la oposición, y el presidente del PP instará al jefe del Ejecutivo a aclarar si va a renunciar a la política de “diálogo y cesiones” a ETA y si va a sumarse a la derrota del terrorismo “desde la ley y sin complejos”.

Zapatero, entrevistado en Cuatro el pasado jueves, subrayó que en política antiterrorista es fundamental evitar la discusión pública para demostrar la voluntad de consenso y aseguró que hará “todos los esfuerzos” para facilitar ese acercamiento de posiciones y hablar “en un espacio de discreción”.

Insistió en que él dio todo su apoyo a Aznar en política antiterrorista y manifestó que eso mismo es lo que le pedirá a Rajoy mañana, porque se siente “con toda la autoridad moral”.

Ante el pesimismo mostrado por Zapatero, De la Vega precisó el viernes que no da por “fracasada de antemano” la reunión y consideró que se había limitado a “constatar una realidad” cuando dijo que el PP había hecho de la lucha antiterrorista “el eje vertebral” de su oposición, de manera “irresponsable”.

Por su parte, Rajoy aseguró el jueves que “arrimará siempre el hombro para luchar contra ETA y derrotarla, pero no para negociar” y garantizó que en la reunión no pondrá condiciones, pero sí pedirá que no tomen posesión los concejales de ANV.

Se mostró dispuesto a apoyar “a cualquiera que haya hecho las cosas bien o mal en el pasado que quiera derrotar a ETA” y apostó por “construir el futuro” aprendiendo de los errores cometidos.

Tras él, el viernes habló el secretario general del PP, Ángel Acebes, quien consideró que la reunión “puede ser útil”, pues debe servir para que Zapatero explique a los españoles si va a “rectificar completamente” su política de “diálogo y cesión a ETA”.

Acebes consideró que pedir que se impida a los concejales de ANV acceder a los ayuntamientos no es “una condición política”, sino un “requisito básico y fundamental de la política de derrota del terrorismo”.

La reunión de mañana será la octava que celebran Zapatero y Rajoy desde el inicio de la legislatura.

El último encuentro entre ambos, que concluyó con un cruce de reproches, tuvo lugar el pasado 8 de enero, nueve días después del atentado perpetrado por ETA en el aeropuerto de Barajas, en el que murieron dos ciudadanos ecuatorianos.

Zapatero y Rajoy se habían reunido apenas dos semanas antes -el 22 de diciembre- y ya habían quedado patentes sus posturas enfrentadas respecto al denominado proceso de paz, hoy definitivamente roto.

Su anterior reunión se había celebrado el 28 de marzo de 2006, tras el anuncio de alto el fuego permanente de ETA y entonces ambos estimaron que habían dado un paso para recuperar la confianza.

Zapatero garantizó a Rajoy que le informaría puntualmente sobre el proceso de paz y éste le trasladó el apoyo de su partido en el objetivo de acabar con ETA.

La de mañana será así la cuarta reunión entre Zapatero y Rajoy centrada casi exclusivamente en la política antiterrorista.

En sus anteriores encuentros -dos en 2004 y otros dos en 2005-, con mayor o menor grado de acuerdo, ambos líderes debatieron también sobre otros temas, como la reforma de la Constitución o las reformas estatutarias.

Mañana Zapatero y Rajoy también deberán cerrar las fechas concretas y el formato del debate del estado de la Nación, que se celebrará previsiblemente en la primera semana de julio.

Otro de los asuntos que Zapatero le expondrá será el relativo al futuro Tratado europeo y la posición que el Gobierno defenderá en la cumbre de Bruselas de los días 21 y 22 de junio.

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