Podemos lleva al Parlamento la “alarma social” del nombramiento de la directora general de Justicia

María Lourdes Quesada Díaz, secretaria general del Servicio Canario de Salud.

Salvador Lachica

Santa Cruz de Tenerife —

Podemos quiere explicaciones del consejero de Presidencia, Aarón Afonso, y las quiere en sede parlamentaria, sobre el cuestionado nombramiento de Lourdes Quesada como directora general de Relaciones con la Justicia.

Y Afonso deberá darlas el miércoles, en su primera comparecencia de control en la Cámara regional de su acción como consejero en la presente legislatura. Y lo hará a requerimiento de la portavoz de Podemos, Noemí Santana, para quien el nombramiento de Quesada ha producido “alarma y crispación social” debido a los antecedentes de esta alto cargo.

Quesada, uno de los primeros cargos nombrados por el actual Gobierno, fue directora general técnica con Mercedes Roldós al frente de la Consejería de Sanidad entre 2007 y 2010, y fue imputada en dos actuaciones judiciales: la adjudicación del servicio de ambulancias y el denominado caso Lifeblood en el que se adjudicó a una empresa creada ad hoc (pues era una antigua inmobiliaria) los servicios de hemodiálisis de los hospitales Doctor Negrín de Gran Canaria y José Medina Orosa de Lanzarote.

Santana ya ha asegurado que el perfil de Quesada “dista mucho del compromiso” adoptado por el presidente Fernando Clavijo durante su investidura, que afirmó que iba a ser “tajante contra la corrupción”.

Antecedentes privatizadores

Además, la portavoz parlamentaria de Podemos cuestiona el nombramiento de una persona cuyos antecedentes “demuestran que no defiende los servicios públicos, sino la privatización de los mismos, como hizo en dos ocasiones en Sanidad”.

Y a todo ello se une el hecho de que es esposa del Fiscal Jefe de Las Palmas, Guillermo García Panasco, lo que cuestiona éticamente que vaya a ser la responsable de las relaciones gubernamentales con la Justicia al quedar cuestionada su imparcialidad.

Por último hay que recordar que este cuestionado nombramiento se produce en un departamento que está paralizado políticamente por el propio presidente Clavijo, que aún no ha dado vía libre al socialista Manuel Fajardo como viceconsejero de Justicia. Un viceconsejero que sería, paradójicamente, el jefe de Quesada, de la que pidió reiteradamente su cese a principios de 2011, cuando Fajardo llevó las riendas de la investigación del caso Lifeblood en el Parlamento de Canarias.

Aunque no solamente fue Fajardo el que arremetió en las postrimerías de la VII Legislatura contra la ahora directora general de Relaciones con la Justicia, pues también lo hizo Francisco Hernández Spínola, actual vicesecretario regional del PSOE y antecesor de Afonso en la Consejería.

Es más, el actual secretario insular del PSOE Gran Canaria, Ángel Víctor Torres, afirmó que “chirría” un nombramiento de un ex alto cargo del PP que en ningún momento fue consultado al partido.

Para Santana, la directora general “ha estado entrando y saliendo de los juzgados por presuntas irregularidades vinculadas a la corrupción, la última de ellas con un auto de sobreseimiento que solo es provisional”, por lo que el consejero Afonso deberá ser muy convincente en sus explicaciones.

Hasta el momento, éste ha defendido la trayectoria y la valía de Quesada, recordando que “no hay ningún proceso judicial abierto contra ella”.

“No la podemos estigmatizar porque hace años fuera llamada a declarar”, aseguró Afonso tras las primeras críticas recibidas por el nombramiento.

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