El Ayuntamiento de la capital grancanaria estudia dejar visible un yacimiento como atractivo turístico

LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 11 (EUROPA PRESS)

El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria estudia dejar visible un yacimiento arqueológico hallado en la calle San Marcial, donde se ha localizado un antiguo canal para la conducción de agua hacia el “primer asentamiento castellano”, restos de cerámica del siglo XV y un paquete sedimentario con presencia de restos óseos humanos que tienen que ver con el cementerio del antiguo Hospital de San Martín, un descubrimiento que da “valor añadido” al casco histórico de Vegueta y Triana, que aspira a ser declarado Patrimonio Histórico de la Humanidad.

Así lo anunció hoy el concejal de Ordenación del Territorio del Consistorio capitalino, Néstor Hernández, que el objetivo es dejar el callejón “para uso peatonal y que se pueda convertir en un atractivo turístico más”. Si bien abogó porque, cuando concluya la intervención arqueológica, se instalen “barreras de acceso y limitar también los accesos nocturnos”.

“Ya se verá cuál es la solución más factible, es un riesgo pero se pueden establecer placas de protección de metacrilato que faciliten su visión y que impidan la agresión. En todo caso, rescatar visualmente los yacimientos arqueológicos de una ciudad siembre es un valor añadido tal como ocurre en Zaragoza, Londres, Roma”, argumentó.

El arqueólogo y director de la excavación, Julio Cuenca, explicó que se han encontrado los restos arquitectónicos más antiguos localizados hasta ahora en las excavaciones de Obispo Codina, en la confluencia de esta calle con el callejón de San Marcial. Los muros exhumados presentan una técnica constructiva característica de los siglos XV y XVI.

Asociados a estos muros se han localizado restos óseos humanos que tienen que ver con el cementerio del antiguo Hospital de San Martín, que se encontraba al poniente, en las huertas de la edificación, y todo eso fue derribado en el proceso de demolición del hospital a finales del siglo XVIII para la ampliación de la Catedral y de la Iglesia del Sagrario. No se ha podido excavar en su totalidad porque el paso de una tubería, instalada en los años 40 del siglo XX, que lleva aguas fecales, lo impide.

Además de los restos relacionados con el antiguo Hospital de San Martín, se ha descubierto la Cilla de La Catedral de Santa Ana, lugar donde se almacenaba el grano, y que se encontraba en la planta de sótano del Colegio de San Marcial del Rubicón que fue destruido.

DOS MONEDAS DEL SIGLO XV

En concreto, en la calle o callejón San Marcial se han encontrado los restos de un canal muy antiguo de aguas que, por la presencia de materiales arqueológicos hallados, los expertos estiman que “llevaba agua hacia el primer asentamiento castellano del Real de Las Palmas”.

Ello se sustenta sobre todo en la presencia de diversos vestigios, restos de cerámica de finales del siglo XV y hasta el momento dos monedas de la misma época, un ceitil portugués y un maravedí de los Reyes Católicos.

Por tanto, ello lleva a los arqueólogos a considerar que se trata de una obra hidráulica muy antigua que probablemente sirvió para llevar agua potable desde el Guiniguada hacia el asentamiento primigenio situado en el entorno de la Ermita de San Antonio Abad y cuyos límites de aquel primer asentamiento llegarían por el poniente asta la plazoleta de Los Álamos.

El arqueólogo Julio Cuenca recordó que “se está todavía en proceso de excavación” y se prevé intervenir también en la plazoleta de Los Álamos, entre la Casa de Colón y la trasera de la Catedral, ya que se calcula que “el canal va en esa dirección y puede que aporte otro tipo de información arqueológica relevante también”.

El especialista reconoció que no esperaba que aparecieran tantos hallazgos en la calle Obispo Codina, que se abrió a finales del siglo XVIII, como ha sucedido. Por contra, “sí teníamos esperanza en la calle San Marcial porque es un callejón que se abrió a finales del siglo XVIII pero que caía de lleno en la antigua planta del Hospital San Martín”, admitió, al tiempo que señaló que “era presumible que en el casco histórico de Vegueta se produjeran hallazgos de esta naturaleza”.

OBRAS HASTA JUNIO

Por su parte, el concejal Néstor Hernández, resaltó que “las obras van a poner en valor el conjunto histórico Vegueta-Triana, cuyo pavimento, instalaciones eléctricas y telefónicas todavía estaban colgadas en muchas zonas”.

Recordó que la obra en el casco histórico es financiada por el Gobierno regional para la reestructuración de la zona con el enterramiento de instalaciones, tarea que comenzó el 31 de diciembre del pasado año y prevé que concluya en junio. Subrayó que el estudio arqueológico no paraliza los trabajos.

El edil anunció que el Ayuntamiento está estudiando la posibilidad de que la calle San Marcial se quede abierta “para uso peatonal y que se pueda convertir en un atractivo más para disfrute de vecinos y turistas”, para lo que la institución local está “buscando soluciones” desde el departamento de Tráfico.

Agregó que “justo en una obra privada al norte de la calle San Marcial se ha encontrado también un importante yacimiento de antiguas dotaciones habitacionales de viviendas de la sociedad primigenia”, hallazgo que destacó que tiene que ser valorado por el Consejo Insular de Patrimonio y con el Consejo Municipal.

Sin embargo, aseguró que “la calle Obispo Codina va a seguir abierta al tráfico por ahora y será muy difícil dejar visible” el yacimiento encontrado en este punto. No obstante, no descartó estudiar soluciones que permitan que sea visualizado o adoptar decisiones para “protegerlo con un aislante para las humedades y cubrirlo de arena”.

Ante las quejas de un empresario sobre los perjuicios que ocasiona la obra para los comercios, Hernández justificó que la actuación “está bien coordinada y va en plazo, sin que se paralice la excavación arqueológica”.

Igualmente, el concejal puso de manifiesto la necesidad de que en la revisión el próximo año del Plan Especial de Conservación Vegueta-Triana se estudien “también los niveles de protección del subsuelo, sin que ello suponga ningún freno a la hora de ejecutar obra privada o pública”. Adelantó que la institución local externalizará la revisión del plan especial en esa zona.

A su entender “es necesario aumentar el nivel de protección de muchas fachadas y de intervención interior”, ya que considera que “se han permitido derribos que nunca se debieron permitir.

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