Karina Beltrán muestra su serie 'El hilo de los días' en la Sala de Arte Contemporáneo de la capital tinerfeña

SANTA CRUZ DE TENERIFE, 30 (EUROPA PRESS)

La Sala de Arte Contemporáneo, ubicada en el edificio del Museo Municipal de Santa Cruz de Tenerife, su suma a la nueva edición de Fotonoviembre con la exposición 'El hilo de los días', de la artista Karina Beltrán, una muestra que reúne e 66 fotografías de pequeño y mediano formato, que se podrá visitar desde hoy, después de que sea inaugurada a las 20.30 horas, hasta el próximo 30 de noviembre en horario de martes a viernes, de 10.00 a 20.00 horas; y sábados y domingos, de 10.00 a 15.00 horas, según informó hoy la Consejería regional de Cultura en una nota.

La serie 'El hilo de los días' de Karina Beltrán ha sido construida con imágenes tomadas, entre 2007 y 2009, en distintos escenarios: Berlín, Copenhague, Londres, París, Madrid y Canarias, puntos geográficos distantes pero unidos entre sí por ese hilo in (visible), por esa corriente de luz, que va tejiendo los paralelos de la existencia. Un mismo sentimiento recorre el itinerario de personas que no llegan a conocerse pero que intuyen que hay algo, más allá de si mismas, que las conecta de algún modo.

Se trata de una serie de gran carga poética que captura esos pequeños momentos cotidianos en los que se percibe el prodigio de la elevación de las almas. La mirada al cielo, el vuelo de la cometa, todo invita a subir, todo es sutil, como sutil es la felicidad que tan pronto se atrapa como se diluye. Un viaje hacia el fondo de las emociones que habla de la fragilidad y también de la materia sublime de la condición humana.

La búsqueda premeditada de atmósferas sutiles contribuye a crear esa unidad de fondo que planea sobre toda la exposición. Como dice Goretti Ramírez, en el texto del catálogo que acompaña a la muestra, “los personajes de 'El hilo de los días' tienen conciencia de formar parte de una coreografía cuyos pasos se ejecutan sólo con los brazos (...). Si toda serie implica una secuencia a la que (al menos en teoría) siempre se le puede añadir una unidad, las escenas fotografiadas sugieren que todo instante de nuestra existencia está precedido y seguido por un número inabarcable de otros instantes cuyo orden último sólo puede ser intuido”.

Karina Beltrán, que estudió Bellas Artes en La Laguna, se inició en la fotografía en 2001, coincidiendo con sus estudios de postgrado en el Chelsea College de Londres. Fue la necesidad de habitar los espacios vacíos, que hasta entonces habían sido el motivo de su obra pictórica, lo que la condujo a la búsqueda de un nuevo lenguaje. La artista trabaja con emociones. Como ha declarado: “Las imágenes no están en mi mente desde un principio. Parten de una emoción y esa emoción es la que intento capturar, representar, atrapar... Muchas veces una cita literaria, una frase encontrada al azar en un libro, son suficientes para estimular mi imaginación”.

Lo que le interesa a Beltrán es “reflejar la transitoriedad de la vida, la fugacidad de los momentos. La fotografía permite detener esos instantes que suceden y que seguramente no volverán a repetirse”.