Podemos acusa a Antonio Morales de “falta de ética” por conceder una subvención directa a su ex vicepresidente

Miguel Montero, en un pleno del Cabildo de Gran Canaria, con Juan Manuel Brito al fondo. (FLICKR CABILDO DE GRAN CANARIA)

Canarias Ahora

Las Palmas de Gran Canaria —

Miguel Montero, portavoz de Podemos en el Cabildo de Gran Canaria, ha acusado este jueves al presidente de la corporación insular, Antonio Morales, de “falta de ética” al conceder una subvención directa a un proyecto vinculado a su ex vicepresidente Juan Manuel Brito, cesado en febrero tras ser expulsado del partido con el que se presentó a las elecciones, Podemos, por incumplimiento del código ético.

El portavoz de la formación morada recalca que el gobierno insular planea aprobar este viernes en el pleno una partida extraordinaria de 45.152 euros “para entregar a su ex vicepresidente y que éste ponga en marcha el Centro de Estudios y Difusión del Atlántico, un proyecto de análisis sociopolítico ligado a su antigua ONG Acción En Red”.

“Es obsceno ver al presidente de la Corporación utilizar con este descaro el dinero público, si es legal –que está por ver- desde luego no es ético conceder una subvención directa a una persona que hace menos de un año formaba parte de su Gobierno”, ha declarado Montero, quien, no obstante, espera que el presidente dé las explicaciones pertinentes “sobre ésta y sobre su política de subvenciones en general”.

Como ha informado Canarias Ahora, este viernes el pleno insular debe aprobar esa modificación 17/11A, que se eleva a 896.172, 40 euros. De esos casi 900.000 euros, 548.292, 43 euros corresponden a créditos extraordinarios como el que será destinado a un centro de estudios ligado a la ONG Acción En Red Canarias (ahora reconvertida en la Asociación Migrando), la plataforma de activismo social desde la que el grupo liderado por Juan Manuel Brito se lanzó a la política institucional en 2015. Y de la que por ello ha sido expulsada su asociación canaria de la federación estatal.

La partida presupuestaria llega siete meses después de que Brito pasara a un segundo plano político tras la crisis que se abrió en Podemos con sus consejeros tránsfugas y la expulsión de su líder. En febrero pasado, Brito anunció en público su dimisión pero en realidad fue cesado, y por tanto despedido con un mes de indemnización, el prorrateo de las pagas extras que le correspondían y con derecho a paro por lo cotizado. El escándalo coincidió al desvelar Canarias Ahora que Brito había hecho trampas para ganar las primarias de Podemos al Cabildo.

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