El experto de Coalición Canaria defiende que la triple paridad “trajo más justicia y reparación a las islas no capitalinas”
Miguel Cabrera Cabrera era, en 1982, un joven senador de la agrupación de electores Asamblea Majorera (AM) que trabajó en el texto del Estatuto de Autonomía y, por tanto,impulsó el cuestionado sistema electoral canario. Este lunes, invitado por Coalición Canaria (CC) en la comisión para modificarlo, ha defendido el modelo por entender que “no es un sistema fracasado, ya que gracias a él ha llegado más justicia y reparación a las islas no capitalinas”.
“No nos fiábamos de Tenerife ni de Gran Canaria y queríamos un mecanismo que salvaguardara al resto de islas de sus tremendas peleas.Costó una tremenda batalla con TF y GC para conseguir un sistema justo para la época”.
Cabrera, que también fue diputado regional por CC y alto cargo del Gobierno canario, ha insistido en el Parlamento en que “nuestro sistema obedece a unas circunstancias sociopolíticas para un territorio particular en una época concreta”.
“En las islas pequeñas hemos sufrido un brutal centralismo durante casi 500 años, al llevar todas las inversiones a las dos islas centrales y manteniendo regímenes parecidos al antiguo régimen hasta hace bien poco: lo que intentamos con el sistema electoral fue aportar mayor equilibrio”, explicó en su comparecencia en el Parlamento.
“Se nos encendió la luz de alarma cuando vimos que la división provincial seguía centrando la política de la futura autonomía en el pleito entre Tenerife y Gran Canaria y había que hacer justicia con unos canarios marginados por no haber nacido en las capitalinas”, insistió.
Para Cabrera, “fue una solución acertada e inteligente, pues de lo contrario habría seguido la inacción y el olvido hacia las no capitalinas por la pelea constante entre Tenerife y Gran Canaria”.
Pasó por algo
“Es democrático, otra cosa es que no guste a todos, y la discriminación positiva que existe en el mismo hacia las islas no capitalinas es fruto de la solidaridad”, remachó.
Al respecto, el nacionalista José Miguel Ruano agradeció a Cabrera su lección histórica, pues demostró que “lo que pasó pasó por algo y que Canarias se ha construido con muchos problemas”.
“El mundo, afortunadamente, no comenzó cuando Podemos empezó a hacer política, y ”es necesario conocer nuestra propia Historia para asumir que los equilibrios son necesarios“, dijo el portavoz del Grupo Nacionalista.
Desfasado
Al respecto, el socialista Ignacio Álvaro Lavandera defendió que “el sistema electoral, para algunos justo y equilibrado, está desfasado en el tiempo”, por lo que hay que acometer su modificación 35 años después.
“De su intervención se deduce que el sistema electoral fue fruto de la desconfianza y en el PSOE queremos construir autonomía, por lo que miramos con recelo planteamientos insularistas recientes. Nuestra propuesta contribuye a construir el edificio autonómico”, concluyó Lavandera.
Por su parte, Noemí Santana (Podemos) dijo que tras escuchar a Cabrera se ratifica en que “el sistema está viciado desde su origen y da lugar a un Parlamento que no refleja la voluntad de urnas” y “no ha dado respuesta en equilibrio y equidad entre islas capitalinas y no capitalinas, que continúan con situaciones sangrantes”.
“El sistema electoral era adecuado en la Canarias de hace 35 años, era algo transitorio y se ha perpetuado”, dijo Santana.
El mejor posible en 1982
En este sentido, el portavoz de NC, Luis Campos, coincidió en que “no se puede criminalizar la decisión de 1982 sin analizar ese momento. Fue el mejor sistema electoral posible hace 35 años, pero 35 años más tarde debemos avanzar en él”.
“La desconfianza existía no solo entre las islas no capitalinas respecto a las capitalinas, le puedo decir que en el Sureste de Gran Canaria, conocido como Triángulo de la Miseria, había total marginación también por parte de nuestra propia capital”.
En NC entendemos que todas las islas deben estar representadas potentemente en el Parlamento, pero también creemos que hay que corregir la tremenda desproporción entre población y voto que se emite“, concluyó Campos.
En este sentido, el ex senador por AM admitió que “los topes nunca se debieron subir”, pero advirtió de que “no podemos permitirnos pasos atrás en nuestra historia”, como sería acabar con la triple paridad.
“Sean muy cuidadosos con la importante labor que tienen entre manos, porque mantener la triple paridad no es una involución, y sí lo sería volver al pasado de marginación y miseria”, concluyó.