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Primeras elecciones docentes tras la aprobación de la LOMCE

Alumnos aprendiendo en una escuela

Enrique Bethencourt

El jueves 4 de diciembre se celebrarán elecciones sindicales en la enseñanza no universitaria de Canarias, en las que están llamados a participar más de 22.000 docentes. Son las primeras tras la aprobación de la LOMCE. Y se producen tras un periodo en el que se han aplicado fuertes recortes en el sistema educativo de las Islas, fundamentalmente, en los últimos años de la pasada legislatura autonómica. En esta se han mitigado pero no se ha recuperado, ni mucho menos, la situación anterior. Los sindicatos aseguran que la detracción de varios cientos de millones de euros en las cuentas públicas de Educación ha supuesto un notable empeoramiento de las condiciones laborales en el sector y destacan la entrega del profesorado a su tarea pese a las circunstancias cada vez más difíciles en la que la llevan a cabo. Estas elecciones presentan algunas novedades respecto a convocatorias anteriores, por los cambios que se han ido produciendo en el dividido panorama sindical canario.

Estos comicios para elegir a los representantes del profesorado de los distintos niveles no universitarios son los octavos, tras las primeras elecciones realizadas en el año 1987. Luego se repetirían en 1990, 1994, 1998, 2002, 2006 y 2010.

Además, son los primeros después de la aprobación en diciembre de 2013 de la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE), una norma que ha comenzado su andadura en el curso académico 2014/2015. En primero, tercero y quinto de Primaria; y con la introducción de la Formación Profesional Básica.

Una ley, aprobada por la mayoría absoluta del PP, y rechazada por la práctica totalidad de los sindicatos con presencia en el sector, que consideran que se redactó y aprobó sin diálogo ni consenso con las comunidades educativas, y que entienden que supone un retroceso en la concepción del servicio público de enseñanza.

Han sido numerosas las movilizaciones y huelgas de los últimos años en rechazo a la LOMCE; en las que han participado todos los sectores de las comunidades educativas: docentes, padres y madres de alumnado y los propios estudiantes. Los partidos políticos de la oposición, salvo UPyD, se han comprometido a derogarla si hay un cambio de Gobierno tras las próximas elecciones generales.

EA-C

En estos comicios docentes de 2014 ya no participará EA Canarias, un sindicato nacido de una escisión del STEC en 1998 tras la polémica sobre las tutorías de tarde en Secundaria y que, tras un más que exitoso estreno, posteriormente iría perdiendo fuelle elección tras elección. Algunos de sus más destacados integrantes han emigrado a Cobas, una central tras la que, al menos en Canarias y especialmente en Gran Canaria, se aprecia la sombra de Podemos.

Asimismo, UCPL, que nació al tiempo que EA, irá a las urnas aliado con Sepca; e Insucan hará lo propio al concurrir con CSIF. Lo que despeja un poco la sopa de siglas en que se había convertido el espectro sindical educativo en el Archipiélago: en los anteriores comicios, los de 2010, se presentaron diez planchas electorales, aunque tres se quedaron sin obtener representación: CSIF, Sepca y Cobas.

En Canarias se eligen un total de 86 delegados o delegadas, de los que 45 corresponden a las islas orientales y 41 a las occidentales.

En los últimos comicios, los de 2010, ganó el STEC, con un total de 25 actas, seguido de ANPE con 21. También lograron representación CCOO (14), Insucan (8), EA y UGT, ambos con 7, y UCPL (4).

El STEC triunfó entonces claramente en la provincia de Las Palmas, con 17 actas, muy por delante de CCOO (5). Y en Santa Cruz de Tenerife hizo lo propio ANPE, con 16 duplicando al segundo más votado, el STEC (8) y a gran distancia del tercero (CCOO, con 6).

En el plano ideológico, a lo largo de este siglo ha ido creciendo el peso del sindicalismo conservador, especialmente gracias a sus resultados en Santa Cruz de Tenerife, mientras que en Las Palmas sigue siendo claramente hegemónico el de corte progresista.

Los sindicatos que responden a subsectores educativos, caso de los interinos, o que sólo operan en un sector de los enseñantes, como la Secundaria, han ido perdiendo representación progresivamente, lo que les ha llevado a presentarse coaligados con otros en estos comicios de 2010.

Siete listas

En esta ocasión son siete las listas electorales presentadas. Lo que facilitará, dependiendo de los niveles de participación, que todas ellas consigan representación en las juntas de personal.

Las reclamaciones laborales, entre ellas las vinculadas a la estructura salarial de los docentes o la disminución de las ratios, están presentes en los programas electorales con que las distintas centrales sindicales concurren a estos comicios, así como la dignificación del papel social del profesorado, la democratización de los centros educativos o distintas medidas de mejora en los diferentes niveles y ámbitos educativos.

También la aplicación de la recientemente aprobada Ley Canaria de Educación no universitaria. No todos los sindicatos apoyaron la misma. Sí lo hizo el mayoritario STEC, que fue parte integrante fundamental de la promotora que impulsó esta ley de iniciativa ciudadana. Mientras que CCOO se desmarcó e insistió en la defensa del Pacto Canario por la Educación, el único acuerdo suscrito en esta legislatura en las distintas comunidades autónomas.

Censo electoral 2014

Pero ahora ambos coinciden en que la Ley aprobada por el Parlamento de Canarias, y que intenta superar las graves restricciones que impone la LOMCE, debe ser aplicada en las Islas, coadyuvando a la mejora de un sistema educativo que presenta aún graves déficit y que está alejado de los parámetros medios de España y Europa.

Una ley que hoy está en riesgo ante la previsible presentación de un recurso de inconstitucionalidad por parte del Gobierno del PP, que paralizaría su aplicación.

ANPE, un sindicato de corte conservador, no comparte la ley canaria de la que dice no conocer “ni una sola medida concreta que le sirva al profesorado para mejorar unas condiciones laborales en permanente estado de deterioro”. Aún así, ANPE considera que el posible recurso ante el Constitucional es claramente “vengativo” y fundado en “motivaciones exclusivamente políticas”.

Las expectativas ante los comicios están claras. El STEC aspira a revalidar su primera plaza y se establece como objetivo mejorar sustancialmente sus resultados en Santa Cruz de Tenerife.

ANPE, por su parte, quiere pasar de segunda a primera fuerza sindical, asegurando que su sindicalismo de gestión les ha permitido crecer mucho en apoyos dentro de los docentes en el último período. Y CCOO quiere recuperar su situación de sindicato más votado que logró en 1998, la única vez que el STEC fue derrotado en las Islas. El resto de organizaciones sindicales quiere dejar de ser marginales o conseguir por primera vez representación en las juntas de personal docente no universitario.

Participación

La respuesta la dará el profesorado en la jornada del jueves 4 de diciembre. La incógnita, y la mayor preocupación de los sindicatos, es que continúen repitiéndose los elevados índices de abstención de las últimas elecciones, las celebradas en 2010.

Quedan lejos, muy lejos, el entusiasmo del profesorado y los altos niveles de participación de las primeras elecciones. Tiempos de desafección y de limitadas esperanzas de cambio.

5% del PIB

Tanto STEC como CCOO han exigido, por separado, que los Presupuestos Generales de la Comunidad Canaria para 2015 comiencen a cumplir los postulados de la Ley Canaria de Educación en materia económica. En efecto, la norma canaria se compromete a que las partidas destinadas a Educación alcancen el 5% del PIB en las cuentas públicas de los próximos seis años. Actualmente no se llega ni al 4% tras el retroceso experimentado desde comienzos de esta década.

Los Presupuestos canarios para el año 2015 no van en esa dirección. Es cierto que Educación aumenta ligeramente, un 0,6%, pero si tenemos en cuenta que la previsión de crecimiento del PIB canario establecida por el Ejecutivo para el próximo año es del 2%, en realidad Educación pierde peso en el conjunto del producto interior bruto con ese exiguo crecimiento para el próximo año.

Los sindicatos se quejan de los recortes que ha sufrido el servicio público educativo en los últimos años. Aseguran que los mismos han supuesto un notable empeoramiento de las condiciones laborales en el sector y destacan la entrega del profesorado a su tarea pese a las circunstancias cada vez más difíciles en la que la llevan a cabo.

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