El Colegio de Abogados denuncia los insultos contra el 'letrado del Carnaval'

El Colegio de Abogados de Santa Cruz de Tenerife exigió este miércoles respeto a la actuación del letrado Felipe Campos, que interpuso la demanda contra el Carnaval en el casco urbano, y consideró que “los insultos e improperios” que ha recibido constituyen “un grave atentado contra la independencia” profesional.

Así lo afirma en un comunicado la Junta de Gobierno del Colegio de Abogados, en el que señala que los insultos vertidos contra el citado colegiado por un grupo minoritario de ciudadanos constituyen un grave atentado contra la independencia, la libertad de defensa y expresión, así como contra la dignidad de su ejercicio profesional ante los tribunales de justicia.

Sin entrar ni en el fondo ni en la forma del asunto defendido por el letrado, el Colegio lamenta la actitud de “unos pocos ciudadanos que no han sido ejemplo de la tolerancia que caracteriza a esta ciudad”.

El Colegio afirma que “se ve en la obligación de actuar de oficio” para amparar la independencia, la libertad de defensa y expresión, así como la dignidad profesional del abogado, que tiene el derecho y el deber de defender y asesorar libremente a sus clientes.

La independencia del abogado resulta tan necesaria como la imparcialidad del juez dentro de un Estado de Derecho y su actuación profesional sólo sirve al ciudadano “si está exenta de presión y posee total libertad e independencia de conocer, formar criterio, informar y defender, sin otra servidumbre que el ideal de Justicia, de manera tal que en ningún caso debe actuar coaccionado”, agrega.

La Junta de Gobierno considera que la conducta manifestada por unos pocos ciudadanos no se corresponde con el tradicional espíritu de tolerancia y libertad que ha caracterizado y caracteriza tanto en el ámbito nacional como internacional al pueblo de Tenerife.

Por ello cree que esa conducta ha sobrepasado las críticas e incluso sátiras que siempre han sido admisibles y deseables en tiempos de carnaval.

Precisa que aunque Felipe Campos no lo haya solicitado expresamente, la Junta de Gobierno hace “un respetuoso llamamiento a ese grupo minoritario de ciudadanos” para que comprendan que la labor del abogado ante los tribunales debe desarrollarse de forma libre e independiente y, en consecuencia, cesen en su actitud.

También reclama que se reconduzca esta conducta “a los cauces de la calma y el respeto mutuo” que han presidido desde hace dos siglos los Carnavales de la capital tinerfeña.

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