La Junta de Cronistas Oficiales de Canarias pide a las instituciones una partida fija para El Museo Canario
La Junta de Cronistas Oficiales de Canarias acordó este lunes, después de una reunión de su directiva, pedir a las administraciones públicas que asignen una partida “fija y permanente” en sus presupuestos anuales para garantizar la financiación de El Museo Canario y evite, en lo sucesivo, los riesgos de desaparición que ha sufrido en estos días, según un comunicado.
Según los cronistas, tras estos acontecimientos, urge la necesidad de que el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, el Gobierno de Canarias, el Cabildo de Gran Canaria y las entidades privadas, “especialmente las bancarias”, apuntan, “comprometan de manera fija y permanente en sus presupuestos anuales el mantener las subvenciones que han venido siendo habituales con esta institución, evitando así que tal procedimiento de colaboración cultural esté sometido a coyunturas económicas y a otros parámetros que choquen con los fines altruistas y culturales” de El Museo Canario.
Los cronistas recuerdan que El Museo Canario es “una de las Instituciones de nuestro patrimonio cultural más importantes de Canarias, en tanto que es depositaria de un valiosísimo fondo arqueológico, bibliográfico, documental y de hemeroteca que es referencia ineludible de la memoria histórica” de las Islas.
El colectivo no pasa por alto la condición de privada de la institución, pero recuerda que “por su creación legataria reconocemos que desarrolla una labor de servicio público a la comunidad científica y a la sociedad canaria en general, que se manifiesta en el uso de dichos fondos y museo, así como de sus instalaciones en cuanto foro cultural por parte de la ciudadanía”.
Por último, la Junta de Cronistas Oficiales insta a las instituciones públicas y autoridades culturales de Canarias a que “adopten las medidas adecuadas tendentes a la preservación del patrimonio cultural isleño, expuesto a la vulnerabilidad de circunstancias fortuitas”.
Ante esta situación, esta organización manifiesta su “especial preocupación” por el estado del patrimonio documental de los archivos municipales de Canarias “que, salvo excepciones, actualmente están sumidos en un lamentable abandono, y que constituyen fuentes básicas para el desarrollo de la labor de los cronistas e investigadores de la historia local”.
