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Detenido en Tenerife por ejercer la ginecología sin licencia y filmar a más de 1.000 pacientes

Un ciudadano argentino de 54 años ha sido detenido en Tenerife como presunto autor de los abusos sexuales que al parecer sufrieron mujeres en varias consultas en las que trabajaba como ginecólogo, a pesar de que su doctorado en medicina general no ha sido convalidado, informó este lunes la Policía Nacional.

El detenido, que ha sido identificado con las iniciales E.R.R.T., trabajaba en varias consultas del municipio de La Laguna y al parecer grabó las prácticas sexuales que realizaba a las pacientes que, según se indica en un comunicado policial, en algunos casos “parecían no ser percibidos por las víctimas”.

Este hombre había sido detenido en La Laguna en 1996 por ejercer la medicina sin tener convalidados los estudios, y durante la investigación los agentes de la Policía Nacional se han incautado de gran cantidad de material audiovisual e instrumental en tres de las consultas en las que trabajaba.

Del estudio de lo incautado la Policía Nacional deduce los delitos de intrusismo profesional, contra la intimidad y usurpación del estado civil, pues se hacía pasar por otros médicos, así como de posibles abusos sexuales.

Según la Policía Nacional, el detenido grabó a más de 1.070 mujeres, que en la mayoría de los casos no ha sido posible identificar a las víctima.

La primera detención se produjo en noviembre de 2006, pero fue puesto en libertad con cargos.

En febrero de este año dos de las víctimas fueron identificadas e interpusieron una denuncia, por lo que el juzgado ordenó al supuesto autor de los delitos que declarase.

La Policía Nacional indica en el comunicado que esta persona, que se personaba de modo puntual en el juzgado en esta ocasión “intenta evadir” la acción de la Justicia y es localizado en el Aeropuerto Tenerife Sur.

Cuando los agentes policiales del aeródromo le solicitaron la documentación para comprobar la identidad proporcionó el pasaporte y abandonó el lugar “a toda velocidad”.

La detención se llevó a cabo ese mismo día en el municipio de Candelaria, al que el hombre llegó en un vehículo en el que su primera mujer lo había recogido en la zona de Cuesta Piedra de la capital tinerfeña.

El hombre se había afeitado la perilla y se había cortado el pelo, que también se había teñido, desde la actuación policial en el aeropuerto.

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