Los despedidos del Hospital Doctor Negrín boicotearán los actos de Coalición Canaria

Francisco Gonzáles, trabajador de mantenimiento del Hospital Doctor Negrín y Juan Pablo Santana, secretario general de la Federación de Industria de CCOO, junto a un grupo de trabajadores que acampan fuera de la Consejería.

Jennifer Jiménez

Las Palmas de Gran Canaria —

Los trabajadores de mantenimiento despedidos del Hospital Doctor Negrín de Las Palmas de Gran Canaria advierten de que seguirán su lucha para que se les devuelva su puesto de trabajo. Un total de 35 de los cincuenta empleados afectados se encuentran desde hace dos semanas acampados frente a la sede de la Consejería de Sanidad y aseguran que acudirán a todos los actos públicos de Coalición Canaria “para que les de vergüenza”, afirma el secretario general de la Federación de Industria de CCOO, Juan Pablo Santana.

Francisco González, uno de los empleados afectados por el despido, explica que la gestión del servicio de mantenimiento fue adjudicada a una nueva empresa que ha preferido contratar personal nuevo. La entidad entiende que si, dentro de unos años, en el próximo concurso de licitación entrara otra empresa, tendrían que pagar las antigüedades a estos trabajadores. Por ello, los empleados exigen que se modifique el convenio y que se incluya una cláusula de subrogación para “no ser una carga para esta empresa”.

El trabajador afirma que han mantenido reuniones con políticos del Gobierno de Canarias pero que “sus promesas no se han hecho efectivas”, ya que tras varias semanas la situación sigue siendo la misma.

Eloy, ha sido durante ocho años electricista del Hospital y es otra de las personas a las que les llegó la carta de despedido el día 19 de febrero. Considera que sus compañeros son trabajadores cualificados que llevan muchos años, y no comprenden por qué han llegado a este punto, y por qué la empresa se ha cerrado en banda para llegar a un acuerdo.

A ello se le suma que “la situación ahora mismo no está para perder un trabajo”, y por ello cree que es justa su reivindicación. “Hay compañeros que llevan desde el inicio, desde hace 15 años, o incluso desde que se comenzó la obra”, puntualiza.

Los empleados despedidos aclaran que hay tres personas de esos cincuenta afectados que sí que han mantenido su puesto de trabajo, con el objetivo de formar al personal nuevo y que están en condiciones por debajo de las que se establecidas en el convenio. Creen además que está en peligro este servicio en el Hospital ya que los nuevos trabajadores , a pesar de que no dudan de su profesionalidad, requieren de un tiempo para prepararse puesto que si se produce una avería, tardarían mucho más en dar una respuesta.

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