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Las ayudas a Cáritas caen un 50% en tres años

Efe

Cáritas atendió a 46.447 personas en 2012 en Canarias, cada vez más jóvenes, en un contexto de recrudecimiento de la pobreza que ha llevado a que sean más los ciudadanos dispuestos a colaborar con ella, no sólo con donativos, sino “tocando pobre”, como ha pedido el papa Francisco.

El obispo de la Diócesis de Canarias, Francisco Cases, y el director de Cáritas Diocesana de Tenerife, Leonardo Ruiz, han dado a conocer este jueves en Las Palmas de Gran Canaria y San Cristóbal de La Laguna el balance de actividad de esta ONG en las islas, en dos ruedas de prensa en las que han coincidido en criticar la actitud de las administraciones públicas ante la extensión de la miseria.

En la presentación de la memoria 2012 de Cáritas Diocesana de Canarias, el obispo Cases ha recalcado que los problemas sociales han de solucionarlos las administraciones que las gobiernan, algo que, sin embargo, no ocurre.

Por ello, ha agradecido la colaboración ciudadana que facilita la labor de esta organización y que ha crecido de forma notable, tanto en aportaciones económicas, que en los últimos seis años han pasado de representar el 33% al 52% de los recursos de Cáritas, mientras que las subvenciones públicas han disminuido un 50% entre 2009 y 2012.

Cases ha destacado que en este apartado, han aumentado las suscripciones mensuales, cuyo valor medio supera además los 200 euros. A ello se suma el hecho de que ha crecido el número de voluntarios y también su cualificación.

El obispo de la Diócesis de Canarias cree que es “de chiste” que la administración pública envíe a ciudadanos a Cáritas y ha recalcado que esta organización, cuyos equipos “no fichan personas en las parroquias para dar, sino que acompañan” a los más necesitados, “tocan pobre”, en palabras del papa Francisco.

Más de 2.100 voluntarios

En concreto, el pasado año Cáritas prestó ayuda a 46.447 personas en Canarias con la ayuda de 2.139 voluntarios, según ha informado Pedro Herranz, su director en la provincia de Las Palmas, donde los beneficiarios de ayuda fueron 12.121 personas, el 65% con familia, lo que supuso que la acción de la organización llegara en esta provincia a 27.831 ciudadanos, entre ellos 5.134 menores.

Sólo el 5% de todas las personas atendidas por Cáritas en Las Palmas en 2012 recibía una prestación de los servicios sociales y el 86% no tenía garantizado el derecho a la vivienda debido, fundamentalmente, a que el 75% se encontraba en situación de desempleo.

Por su parte, el director de Cáritas Diocesana de Tenerife, Leonardo Ruiz, ha informado que en 2012 acudieron a la institución en busca de ayuda 30.000 personas en la isla, de las que la entidad pudo dar respuesta a 18.616.

Las demandas más frecuentes de las personas que acudieron a Cáritas tuvieron que ver con la alimentación, los gastos relacionados con la vivienda y la búsqueda de empleo.

Ruiz ha detallado, durante la rueda de prensa de presentación de la memoria del año pasado, que durante 2012 Cáritas de Tenerife invirtió casi cuatro millones de euros, un 3% menos en relación a 2011, en atender a 18.616 personas, unas 5.900 familias,

La inversión de Cáritas Diocesana de Tenerife en el departamento de acción social fue de 2,7 millones de euros, mientras que desde el programa de empleo se han insertado a 108 personas, un 30,5% de las 354 atendidas.

“Ya me gustaría conocer los datos de inserción laboral del Servicio Canario de Empleo”, ha agregado.

Según los datos que baraja Cáritas de Tenerife, en la zona metropolitana de la isla hay entre 50 y 60 personas que viven en la calle.

Mujer con hijos a su cargo y baja formación

Leonardo Ruiz ha indicado el perfil de las personas que acuden a Cáritas: mujer, de nacionalidad española, con hijos a su cargo, baja formación y escasos o nulos ingresos; familias desestructuradas o monoparentales; cada vez más varones entre 50 y 55 años; inmigrantes en situación administrativa irregular; y personas o familias “normalizadas” que acuden por primera vez.

A nivel regional, el trabajo realizado por Cáritas ha llegado a 46.447 personas, fundamentalmente mediante el trabajo con las familias, “ya que suele ser la mujer quien acude a la institución a para solucionar una realidad familiar”.

Leonardo Ruiz ha asegurado que “el recorte de los derechos promueve una sociedad más empobrecida y aumenta las diferencias sociales”.

Ha agregado que “los recortes sociales emprendidos” por los gobiernos “sólo responden a intereses financieros y económicos, no a las necesidades sociales”.

Ruiz ha destacado que los recortes “vinculan los derechos fundamentales de las personas a la capacidad económica de cada individuo, promueven una sociedad más empobrecida y aumentan las diferencias sociales”.

El director de Cáritas Diocesana de Tenerife ha comentado que los datos de demanda de atención de 2012 “confirman el deterioro de las condiciones de vida de la población canaria” y ha denunciado que el sistema se “demuestra carente de valores que primen a la persona”.

“Siguen sacrificando al ciudadano y sus derechos en nombre de un bienestar económico sólo accesible para unos pocos”, ha considerado.

Los directores de Cáritas en Canarias han resaltado que “no es intención de la entidad obtener más recursos de las administraciones, sino que sean éstas las que asuman sus obligaciones en políticas sociales, de empleo y sanitarias”.

Leonardo Ruiz ha relatado que “Cáritas interviene desde el principio de la subsidiariedad y complementariedad a la administración pública y no sustituyéndola”.

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