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Las tortugas bobas van a la guardería

Transcurrida casi una semana desde que comenzaran las eclosiones, las arenas de la Playa de Cofete han visto emerger un total de 402 crías de tortuga boba (Caretta caretta) dentro de la quinta experiencia que se desarrolla en torno al Proyecto de Reintroducción de esta especie en Fuerteventura. Con los últimos nacimientos, quedan pocos huevos por eclosionar entre los trasladados el pasado mes de julio desde Cabo Verde (playa de Ervatao, Isla de Boavista) hasta Fuerteventura.

Según los datos que maneja el equipo científico de biólogos del ICCM (Instituto Canario de Ciencias Marinas) y de la ULPGC que tutela el proceso, los valores registrados son positivos y alentadores en lo que respecta al porcentaje de tortugas nacidas en cada nido, así como en cuanto a su talla y peso.

Desde que comenzaran a producirse las eclosiones, las crías que han venido naciendo han sido trasladas a la Guardería de Tortugas, en el Muelle de Morro Jable, para comenzar con un proceso de cuidado y alimentación que las mantendrá durante al menos el próximo año en estas instalaciones. Será hasta que alcancen el tamaño y el peso suficientes para desenvolverse en el mar con posibilidades de supervivencia, ya que cuando son recién nacidas y se dirigen directamente al mar sólo llega a la edad adulta entre un 1% y un 5% de las tortugas.

Ocho personas al cuidado

Los datos recogidos de las 402 tortugas nacidas hasta ahora en Cofete indican la buena salud de las camadas, con valores que oscilan entre los 16 y los 19 gramos de peso de las crías al nacer, y entre 43 y 45 milímetros de caparazón.

Entre el Campamento Tortuga de Cofete y la Guardería de Tortugas de Morro Jable se encuentran hasta ocho personas a cargo del cuidado y estudio de las crías, entre biólogos, técnicos y los voluntarios de Adisfuer, asociación que desde el año pasado colabora en este proyecto. La Guardería de Tortugas cuenta con 20 tanques independientes en los que se acoge a las últimas tortugas en nacer, así como otros ejemplares más mayores pertenecientes a experiencias anteriores que todavía no han sido soltados al mar.

La reintroducción de la tortuga boba en Fuerteventura se viene desarrollando de manera experimental desde el año 2006, contando entre las entidades que lo promueven con el Cabildo de Fuerteventura (Consejería de Medio Ambiente), el Gobierno de Canarias (Dirección General del Medio natural de la Consejería de Medio Ambiente), la ULPGC, el Centro Superior de Investigaciones Científicas y el Gobierno de Cabo Verde.

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