Miércoles 24 de julio: día previsto para el jaque mate a Coalición Canaria en el Cabildo de Tenerife

El presidente insular Carlos Alonso y Fernando Clavijo, entonces titular en funciones del Gobierno de Canarias, en el pleno de investidura del primero

D. M.

Santa Cruz de Tenerife —

Miércoles 24 de julio de 2019. Este es el día que por ahora más se acerca a dejar aparcado el dominio político de 32 años de ATI-CC en el Cabildo de Tenerife. Ese día, que ya es mañana, a partir de las 12.00, se celebra el pleno (con 31 integrantes) de la Corporación insular convocado para debatir primero y votar después la moción de censura presentada contra el actual presidente, Carlos Alonso (CC), con el apoyo mayoritario inicial de los siguientes partidos: PSOE, con 11 consejeros (los mismos que CC); Sí Podemos Canarias, con tres, y Cs, con dos.

Todos ellos suman 16, la cifra casi mágica que debe apoyar la opción socialista a la presidencia del Cabildo de Tenerife, la misma que lidera Pedro Martín, actual alcalde de Guía de Isora, con 24 años en ese puesto (desde 1995), y además secretario general del PSOE en la isla de Tenerife.

La cuenta atrás ya ha empezado y ahora solo queda esperar al recuento final y que este confirme la mayoría absoluta a favor del aspirante y a la vez opositor a Carlos Alonso, Pedro Martín.

Si esa especie de jaque mate se consuma, la pérdida de poder político de CC en la isla de Tenerife, históricamente su principal feudo, desde las siglas insularistas de ATI y luego AIC hasta las actuales de CC, se podrá calificar de catastrófica, de manera especial porque a la posible salida de los nacionalistas del ejecutivo de esa Administración insular se deben sumar las pérdidas de los gobiernos locales en el área metropolitana: en Santa Cruz de Tenerife, con pacto actual entre PSOE y Cs y apoyo externo de Unidas Podemos (el mismo modelo que se pone en práctica en el Cabildo de Tenerife y por el que los dos concejales de Cs en la capital tinerfeña posiblemente sean expulsados de ese partido), y en La Laguna, con acuerdo entre el PSOE, Unidas Se Puede y Avante.

El resultado electoral que abrió la puerta a la censura

La actual moción de censura en el Cabildo de Tenerife sin duda nace por el excelente resultado electoral obtenido por el PSOE en las elecciones del 26M, cuando consiguió empatar en consejeros con CC, con 11 en ambos casos, aunque la fuerza política con más apoyos fue Coalición, con una diferencia de algo más de 1.000 sufragios.

Ese balance socialista en los pasados comicios, que supuso pasar de siete consejeros insulares (entonces en un pleno de 29) a 11 (para un pleno de 31), ha sido lo que ha impulsado la moción de censura que este miércoles se vota, una iniciativa que ha contado con los apoyos, por ahora sin fisuras, de Ciudadanos (el cabeza de lista de este partido, Enrique Arriaga, funcionario en el Cabildo de Tenerife, siempre ha mostrado su interés en desalojar del poder a CC), que sí estaría en el nuevo gobierno insular, y de Sí Podemos Canarias, con tres representantes en el pleno y que también dirán sí al cambio político para iniciar una nueva etapa política y acabar con el “régimen” de CC en la primera administración pública en Tenerife.

Si esas intenciones políticas se consolidan y sobre todo si los dos consejeros de Ciudadanos se mantienen firmes en su postura inicial, pese a las presiones de la dirección de su partido para que renuncien a esos postulados (que los ha suspendido de militancia de forma cautelar y los ha amenazado con la expulsión si terminan apoyando la moción de censura contra Carlos Alonso) y a las que ha activado con fuerza Coalición Canaria con el mismo objetivo y así salvar el gobierno ya constituido por el actual presidente (con apoyo del PP, cuatro consejeros), el cambio en el puente de mando del Cabildo se consumará 32 años después de que el relevo en la presidencia insular fuera de un cargo del PSOE, José Segura Clavell, a la ATI entonces liderada por Adán Martín, político ya fallecido.

Eso ocurrió en el año 1987. Antes del socialista Segura Clavell, el presidente insular, dentro de la etapa democrática actual, fue José Miguel Galván Bello, de UCD y durante el periodo 1979-83. Galván Bello luego terminó en ATI, partido insularista con el que incluso llegó a ser senador por Tenerife.

Más de tres decenios y solo tres presidentes de ATI-CC

Desde hace más de tres decenios, el Cabildo de Tenerife no ha tenido otro presidente que no fuera de ATI-CC, con el inicio de esa etapa por ahora de 32 años con Adán Martín (1987-1999), seguido de Ricardo Melchior (1999-2013) y luego con Carlos Alonso (en septiembre de 2013, cuando Melchior renunció a la presidencia en medio del mandato y dio paso al entonces su principal hombre de confianza y hoy enemigo, al menos político), el mismo que sigue ahora.

Carlos Alonso, antes de pertenecer a CC, formó parte del proyecto político del PP, con el que accedió a cargos públicos de relevancia en el Gobierno autonómico, tanto de director general como de viceconsejero en las áreas de Presidencia y Agricultura de la Comunidad Autónoma de Canarias. Alonso es funcionario de la Comisión Europea.

En declaraciones a Radio Club de Tenerife servidas este mismo martes, un día antes del pleno, el portavoz de CC en el Cabildo de Tenerife, Alberto Bernabé, se ha mostrado confiado en que algunos de los consejeros insulares de Cs al final cambien la orientación de su voto (basta con que lo haga uno de los dos para que no triunfe la moción de censura) y ello puedo dejar las cosas como están ahora: con gobierno insular de CC y apoyo cerrado del PP. Bernabé entendió que ese viraje se debe producir debido a la consideración de tránsfugas de los consejeros de Ciudadanos.

Las espadas siguen en alto y, con más o menos presiones provenientes de distintos frentes políticos, lo cierto es que hay que esperar a las 12.00 de este miércoles, cuando empezará el pleno de un posible cambio político histórico en el Cabildo de Tenerife. El aviso de jaque que supuso el registro de la moción de censura que se debate este 24 de julio de 2019 ahora se puede confirmar como jaque y mate. También todo se puede quedar en una simple caña. Hay que esperar...

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