Una gran casa limpia en Carnaval

La celebración de los carnavales es un acontecimiento de enorme impacto a todos los niveles y su organización requiere de un esfuerzo intensivo de las diferentes áreas municipales, de modo que cada año supone un reto considerable para los servicios públicos, especialmente en materia de seguridad y de limpieza.

Cientos de miles de personas, concentradas cada día en unas pocas horas en una zona concreta de la ciudad, generan, como es lógico, una gran cantidad de residuos que el Ayuntamiento ha de gestionar adecuadamente.

Así que, si entre todos somos capaces de reducir de antemano esos residuos, más fácil será para los servicios municipales su tratamiento, más limpia estará la ciudad y más eficiente será el gasto desde el punto de vista económico.

Cada año intentamos dar una respuesta más rápida y eficaz para mantener las calles de Santa Cruz en buenas condiciones después de la celebración de las grandes citas del Carnaval y cada año intentamos que la concienciación ciudadana al respecto sea mayor.

Con ese doble objetivo, en esta ocasión hemos puesto en marcha una campaña, denominada Carnaval, te quiero limpio y que complementa a las acciones que, de ordinario, se llevan a cabo por el área municipal competente. Se trata, en última instancia, de reducir la cantidad de residuos que se arrojan a las calles, a través del uso de envases reutilizables, y también de promover el reciclaje con la utilización de tres islas ecológicas, ubicadas en otros enclaves en los que se produce la mayor afluencia de personas.

Son pequeños pero imprescindibles pasos que requieren de un compromiso colectivo para que sus resultados sean no solo visibles, sino medioambientalmente significativos. Del mismo modo, dentro del cuadrilátero del Carnaval será instalados alrededor de 200 baños químicos, como ya hicimos el año pasado, cuando se duplicó la infraestructura utilizada en la anterior edición de las fiestas.

En el caso del reciclaje, el Ayuntamiento viene intensificando desde hace años su esfuerzo en esta materia, en colaboración con otras administraciones y entidades sin ánimo de lucro. Por ejemplo, el pasado año logramos las mayores cifras en la recogida selectiva de envases ligeros, papel cartón y aparatos electrónicos. En envases ligeros, los que se han de depositar en los contenedores amarillos, hemos experimentado una subida del 9% respecto a las cifras de 2016 al pasar de los 1.451.520 kilogramos de 2016 a los 1.581.930 kilogramos del año que acaba de concluir.

También hemos subido en la recogida de papel cartón de colegios y centros públicos, con un 18,9%; en la de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE), que ha crecido hasta un 18,8% gracias a los 92.100 kilogramos recogidos el pasado año frente a los 77.990 de 2016; y en el volumen de papel y cartón recogido en los contenedores azules que se encuentran instalados en la vía pública. El crecimiento experimentado en esta materia en 2017 ascendió en un 3,3% respecto al año anterior, con un total de 2.366.690 kilogramos frente a los 2.291.110 de 2016.

Avanzamos, es cierto, pero aún debemos seguir trabajando a distintos niveles para alcanzar la sostenibilidad. Uno de esos niveles es la concienciación ciudadana, así que desde el Ayuntamiento vemos el Carnaval como una prueba de fuego y una gran oportunidad para extender entre los amantes de la fiesta hábitos sostenibles medioambientalmente.

Como bien dice el cómico Aaron Gómez en el vídeo con el que colabora en la campaña -y que recomiendo- Santa Cruz es una casa grande en la que se celebra una gran fiesta; una casa que debemos mantener limpia porque es la de todos.

Durante el Carnaval y, también, el resto del año.

*Alcalde de Santa Cruz de Tenerife