Ahora, a por los redactores de base

Mientras este juzgado de lo contencioso ha aceptado de manera meteórica las peticiones de la emisora ilegal más laureada de la ciudad de Telde, especializada en el insulto, la calumnia y la extorsión a las personas que colocan en su diana, se acumulan en los juzgados de esa ciudad multitud de demandas y querellas que van al ritmo normal de la justicia, es decir, no van. No conforme con coleccionar denuncias de directivos de empresas periodísticas, el portento que Guillermo Reyes tiene al frente de esa emisora-basura la ha tomado ahora con los periodistas de a pie, como Antonio José Fernández, de La Provincia, al que han dedicado toda clase de insultos por publicar una crónica que no les gustó del pleno del pasado lunes. Suponemos que La Provincia ampliará las querellas que tiene contra este hombre tan protegido por la justicia teldense y tan bien defendido (es su derecho, faltaría más) por el despacho del que fuera prestigioso magistrado José Mateo Díez.