Por qué no Arabia Saudí

“Decíamos, queridos alumnos, que vuestro presidente fijó sus ojos en Irak y no en Arabia Saudí o en los petrojeques del Golfo, que sustentan las vías de financiación del terrorismo islámico desde hace décadas con el wahabismo y con el consentimiento de la CIA. Lo hizo Bush porque es un hombre de principios, bueno, de principios y de finales. Y si su padre no logró acabar con Sadam, había que vengar esa ofensa. Yo no me iba a quedar atrás porque ésa foto me gustaba, qué caramba. Otra cosa es que yo, en aquellos momentos, no tuviera ni pajolera idea de dónde me estaba metiendo, ni lo de las petroleras, la verdad. Ningún asesor me previno de las consecuencias, ni el CNI, nuestra CIA, me informó de nada. Daba lo mismo, yo ya me iba y ahí le he dejado el paquete a Rajoy. Lo mío es estar aquí, en USA, el país de las oportunidades, donde un tipo como yo puede llegar aquí tan ricamente, soltarles este rollo y, encima, esperar que me aplaudan. Pues eso. Por cierto, para nota, al que adivine dónde están las armas de destrucción masiva, sobresaliente. Ea”.