Blas Trujillo se escapa una vez más

Pero si resultó toda una sorpresa que Saavedra pretenda aupar a Chano Franquis a las más altas cotas de poder político en el grupo municipal socialista, más sorprendente resultó para algunos destacados socialistas que Blas Trujillo haya optado nuevamente por escurrir el bulto, por emplear la expresión más suave de cuantas se pronunciaron este jueves. Porque lo que inicialmente había diseñado Saavedra para salir de esta crisis política e institucional era rodearse de un tándem formado por Franquis y Trujillo, el primero con mando en plaza sobre los indisciplinados y los que tuvieran la tentación de indisciplinarse, y el segundo para enderezar la renqueante nave presupuestaria y hacendística del consistorio. Los que estaban en las claves daban por hecho que el alcalde tenía cerrado ese acuerdo, pero en el último minuto Blas Trujillo volvió a decir que no, que no se veía ocupándose de los documentos contables y los libramientos de pago de una institución agarrotada por la crisis y las deudas heredadas.