Buenas noticias no son noticia

De vez en cuando se pone muy duro esto de ser periodista y que no te dé un pasmo en el intento. En nuestra actualización de este jueves a mediodía estuvimos en un tris. Las noticias que ofrecíamos a nuestros lectores eran para echarse a correr (y todavía no había hablado Larry Álvarez): desde la del intento de defenestración de José Carlos Mauricio (ya veremos en qué acaba) hasta el dato cierto de que el 67% de las familias canarias llega con dificultades a final de mes. Pero es que el desolador panorama de esa primera página (o home page, en el argot electrónico) se completaba con la constatación de que la obesidad alcanza aquí cotas similatres a las de Estados Unidos y la alarmante certeza de que se incrementa considerablemente el número de personas sin hogar en la provincia de Las Palmas. Tras leer todo esto es natural que cerráramos el ramillete de buenas nuevas informando a nuestros lectores de que “el 10% de la población canaria sufre depresión”. Hasta poco parece con los políticos y periodistas que tenemos.