Y sin Carmelo, menos todavía

Si encima que Soria se pone así, sin Carmelo Ramírez enfrente replicándole, apaga y vámonos. El líder de CC-Compromiso Romaní se encuentra recuperándose de una afección de garganta para la que los médicos le han pedido silencio total. Se recluirá desde ahora en su casa de Santa Lucía para estar una semana más callado que una piedra, usando una pizarra para comunicarse con su familia, con el móvil apagado y prohibiendo que alguien mente a Soria ni para referirse a la famosa presa. La ausencia de Ramírez hasta tenía relajado al líder democrático por antonomasia, que se permitió hasta alguna broma de buen rollito (poquito porque es bendito) con la oposición que quedaba en el salón de plenos. Hasta que llegaron los asuntos de la Presidencia, cuando se armó la que se armó, y gracias a eso, que si no, como si ho hubiera habido pleno.