Esperaremos acontecimientos

Claro que nos podemos equivocar, faltaría más, que algunas de nuestras fuentes informativas no jueguen limpio al cien por cien, o que nos confiemos. Es un riesgo que corremos en determinados ámbitos de la política canaria, donde se entremezclan tantas cosas que a veces es imposible distinguir la verdad de la media verdad. Pero lo que hemos publicado este lunes acerca de los pactos de Mauricio con Soria y con ATI, por la vía de Adán Martín, están suficientemente contrastados por testigos presenciales ante los que el portavoz parlamentario de CC lo ha contado todo. Puede ser, conociéndolo como lo conocemos, que a alguno lo haya engañado; y hasta que, si le fracasa la jugada, diga que todo lo hizo para jeringar a Soria. Pero tenemos experiencia con Mauricio, que trató de desmentirnos hasta su viaje a Nueva York, su suite en el hotel amigo y hasta los movimientos de tierra de su casa en Santa Brígida. Luego lo demostramos, con el localizador de Iberia, con testimonios, documentos y con fotos. Como el tiempo se encargó de demostrar lo de Nardy Barrios, que nos lo desmintieron hasta con ensañamiento.