¿Cómo es eso, Larry?

Está bonito Luis Larry Álvarez para un caldo de pescado. Antes de marcharse de fin de semana dejó activada una especie de bomba fétida, que ha devenido en petardo mojado, con la que pretendía que todos nos creyéramos que el hombre de ATI en Gran Canaria es Mauricio. No mide este hombre las cosas que dice, y menos mal que aquí estamos nosotros para sacar el metro. Es cierto que Mauricio fue la pata grancanaria de ATI, pero en plan ideólogo, cuando se puso a parir aquello de la upenización en la que colocó como ariete al jefe de Larry, José Manuel Soria. Su Excelencia no se ocultó lo más mínimo para expresar lo privado que estaba a) con Mauricio; b) con ser la gran esperanza blanca de una derecha regional con insularismos incrustados; c) con Zerolo, con el que se dejaba fotografiar cada vez que podía; d) con jeringar a sus compañeros de Tenerife hasta el punto de potenciar a ATI en su detrimento. Total, Larry, que el viernes nos lo intentas de nuevo a ver.