Mentiras y revelación de secretos

Que José Manuel Soria es un mentiroso es un dato acreditado. Lo hemos demostrado en este periódico de manera reiterada a lo largo de toda su trayectoria política: miente en los medios informativos, miente en los juzgados, miente en las instituciones. Y mintió este martes en el Parlamento de Canarias, además de revelar deliberaciones del Consejo de Gobierno, un comportamiento considerado delito, además de una transgresión flagrante del juramento que prestan sus miembros con la mano en la Constitución cuando toman posesión del cargo. Porque lo que hizo relatando el contenido de un debate del Gobierno en el que, según sus palabras, Paulino Rivero propuso un incremento de los impuestos, es revelar las deliberaciones secretas del Consejo de Gobierno. Pero si además de esa indecencia (y presunto delito), el presidente del PP canario ha contado una falsedad, estamos ante un episodio más de su larga trayectoria de trapisondas y de mal político. Tras escucharlo en el debate de la investidura de Rivero, hemos tenido que hacer nuestras indagaciones, a ver qué pasó en ese Consejo, si es verdad que el presidente propuso una subida de impuestos y si es verdad que fue José Manuel Soria quien le quitó esa idea de la cabeza. Vaya por delante que fue exactamente al revés, que Soria, a la sazón consejero de Economía y Hacienda, puso al Gobierno en una terrible tesitura: “O cerramos colegios y hospitales o subimos impuestos”.