Santa Brígida, fuera de la doctrina

Pero si Soria y Zaplana vuelven a demostrar que no anda el PP para muchos meneos, en el municipio de Santa Brígida volvemos a encontrarnos con un caso evidente de doble vara de medir por parte de los dirigentes de este partido. Mientras en San Bartolomé de Tirajana el PP ha logrado desacreditar al concejal de Urbanismo por ser primo hermano de un empresario, en la villa grancanaria el mismo partido sigue protegiendo a su concejal de la misma materia pese a ser un tránsfuga, estar condenado por prevaricación y poseer un negocio de materiales de construcción. Para más recochineo, el tal Luis Troya, que así se llama este buen señor, dirige en estos momentos la revisión del planeamiento municipal y firma convenios con los empresarios y titulares del suelo. La oposición, mientras, esperando que le concedan la gracia de un pleno en el que debatir esta cuestión, como exigió el PP en San Bartolomé. Finura y coherencia, que se llama.