Terror en el Tesoro

La conmoción sigue siendo la procesión que circula por dentro de la Dirección General del Tesoro de la Comunidad Autónoma, un departamento dependiente toda la vida de ATI y en estos momentos de José Carlos Mauricio, que no es lo mismo pero es igual. Sólo que, a diferencia de los anteriores mandamases, el actual consejero ni sabe ni contesta, y el director general, el que sustituyó a Amorós, Aurelio Ayala, menos todavía. Hay auténtica incertidumbre por saber qué va a pasar en torno al informe de la Audiencia de Cuentas, porque mientras Amorós, que ha estado estos días en Madrid, calla y amenaza con acciones, los funcionarios se miran los unos a los otros para dilucidar quién sabía más de las operaciones ahora detectadas, quién colaboró con la Audiencia de Cuentas, quién puso cortafuegos a la investigación, quién no tenía ni pajolera idea... Y sobre todo, ¿quién va a firmar lo que haya que firmar para que los actuales responsables políticos cubran sus espaldas?