''Un año muy arduo'' para el ritismo

Menos mal que la industria turística canaria tiene en Rita Martín un baluarte inasequible al desaliento y a los rumores de destitución, porque de no ser por esa consejera, nadie vendría a pasar sus vacaciones a Canarias. Tras dejar reducido el pufo de los Estadios de la Felicidad a menos de millón y medio de euros, la señora Martín se descolgó este lunes con dos milloncejos para promocionar el turismo de golf. Lo anunció al tiempo que daba a conocer un campeonato de ese deporte que estaban presentando simultáneamente las consejeras del ramo de Lanzarote y Fuerteventura, María José Docal y Águeda Montelongo, enemiga íntima de Martín. No desperdició la oportunidad que le brindaban a la consejera los numerosos micrófonos que tenía delante para soltar varias perlas, como que “hay una pequeña sensibilidad de sensación de mejoría” (o sea, que la cosa mejora levemente), pero que éste va a ser “un año muy arduo”, lo que constituye reiteración porque arduo ya es “muy difícil”. Pero ya se sabe que Rita es una reiteración en sí misma.