Esos cables de Navidad

Mientras en el Ayuntamiento se pusieron remolones para entregar el informe de los bomberos, nosotros, de común curiosos, hemos visionado un apasionante vídeo que demuestra a las claras que aquella noche del 5 de diciembre hubo fuegos artificiales en la calle Cano, esquina con Torres. No se ve a nadie con una lata de gasolina en plan pirómano de serie B, ni a un marciano tirando petardos. Más bien todo hacía pensar que esos cables de electricidad que siguen descansando sobre las paredes maestras del edificio se habían vuelto locas de alegría por la llegada de la Navidad y expedían rotundos chispazos y fuegos artificiales de más de un metro de altura. A su lado, unas apetitosas vigas de tea se encargaban de recibir tan calurosa acometida eléctrica ante la mirada atónita del vídeoaficionado que entregó la cinta a los propietarios del inmueble. Dicen las malas lenguas que el alumbrado navideño del Ayuntamiento, que se acababa de inaugurar, se conectó de aquella manera tan peculiar a un torreón cercano y que el calentamiento de la instalación tiene mucho que ver con lo ocurrido. De todas maneras, que investigue la alcaldesa.