Un consejero sin cartera

Si, como se viene comprobando, el dúo de Oriente, formado por José Carlos Mauricio y José Manuel Soria, empieza a ver desmoronarse el suelo bajo sus pies, ¿qué les va a quedar dentro de poco? El gas era trascendental, una vez habían adquirido el compromiso ante Endesa de mantener su control sobre la energía en Canarias. Los trenes, porque ante Alstom la cosa estaba clara, y así se lo hicieron saber aquí y/o en los viajes realizados a París. Ahora quedan los casinos y el istmo de Santa Catalina, donde el dúo y sus mariachis habrán de concentrar todos sus esfuerzos para no quedarse sin los pocos apoyos empresariales que les quedan. El asunto de los casinos, sin embargo, parece estar bichado desde el principio y terminará cayendo por su propio peso. En cuanto al istmo, el destino de Arnáiz y la identidad de quien le sustituya serán determinantes para la forma de acometer proyecto tan ambicioso.