De consoladores, fiscales y cintas de vídeo

Bueno, acabó el accidentado puente y reanudamos del modo habitual nuestra cita diaria con nuestros lectores, que también los festivos paramos. Han sido días muy agitados, especialmente por la disparatada (y al parecer presuntamente delictiva) postura de los controladores aéreos, “consoladores”, que diría María Dolores de Cospedal en feliz errata de los servicios de prensa de la muy noble y leal secretaria general del principal partido de la oposición. Se pueden hacer muchos chistes con el lapsus, pero ni está el país para determinadas guasas ni creemos que la señora De Cospedal tenga un sentido del humor a prueba de bombas ni siquiera para entender el funcionamiento del programa de edición de textos Word y sus correctores ortográficos. Lo mismo que demostró en su visita a Lanzarote, en pleno comienzo del puente, su jefe de filas Mariano Rajoy, que se quedó tirado en el aeropuerto de Guacimeta sin mayores argumentos que el ya popular y muy comprometido “que lo arreglen”. Lo pueden repasar en el fabuloso vídeo que le grabó su asistente personal Sergio Ramos Acosta, el paje que Soria le ha puesto cerquita para que vele por sus intereses. Un vídeo, por cierto, en el que no se incluye la noche de copas en Arrecife que retrató alguien para la Cadena Ser.