Sobre este blog

El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora

Lo menos que se despacha

Las empresas que ejecutaban obras en el Puerto, decíamos, se reunieron para no tener que gestionar tres o cuatro solicitudes de instalar el machaqueo. De este modo, entre ellas subastaron, vía precio y de acuerdo mutuo, que una de ellas pediría la autorizacion y suministraría a ese precio a todas las empresas que, por hacer obras en el Puerto, podían suministrarse de áridos de la cantera de Roque Ceniciento. Testigo de aquel acuerdo fue un hombre entero, que representaba a Lopesan, Francisco López, accionista importante de esa empresa. Lopesan, Pérez Moreno y Dragados dijeron que no les interesaba, y sólo Necso, Fomento y Matías Marrero entraron en esa subasta interna. Consecuencia de todo ello fue que Matías Marrero solicitara ampliar sus instalaciones a lo que se le contestó que sí. Había acuerdo entre todas las empresas y Matías Marrero no se llevaba título alguno. Es decir, no se excluía a nadie y lo que hizo el Puerto fue menos que una concesión, y mucho menos que una autorización. Sencillamente expresó, dentro de los diez días que la ley le otorga para contestar, que no había inconveniente a que la planta de machaqueo suministrara material a otras empresas adjudicatarias de obras en el puerto. Pero hasta para cosas tan nimias hay que saber. Incluso investigar. Por lo tanto, una vez más, Canarias 7 miente. Y sabe que miente.

Sobre este blog

El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora

Etiquetas
stats