144.000 euros de campaña

Lucas Bravo de Laguna es muy dado a meter en los juzgados a todos los que le suben una octava el tonito. Pero no tenemos constancia de que, tras muchos meses de persecución implacable, haya denunciado a Torres Ruano, el empresario que le reclama que le devuelta la pasta que se gastó en la campaña electoral de 2007. Según sus afirmaciones, estamos hablando de 24 millones de pesetas, es decir, 144.000 euros, que se emplearon en fiestas diarias, con asadero y barra libre para los asistentes, con sorteos de viajes a Galicia y fastuosas actuaciones musicales y artísticas. Además, el empresario amigo fue el que pagó con ese dinero que ahora reclama toda la publicidad en Radio Tinamar, la radio de las medianías de Gran Canaria, que emitía en directo todos los mítines del Niño Bravo, para el que sólo había palabras de elogio. Torres Ruano fue el pagano, según él mismo afirma, de los grandes carteles que adornaron Santa Brígida con la efigie del Niño, así como varias furgonetas comecocos que sin duda contribuyeron a que Bravo de Laguna ganara, a un pelo de la mayoría absoluta, sus primeras elecciones como número uno del PP.