Aquel fatídico 14 de mayo

De los interrogatorios a los que han sido sometidos los detenidos por la trama eólica se ha dicho de casi todo. Que si tiraron de la manta, que si se taparon con la manta, que si te vi no me acuerdo... De lo que seguro nadie ha hablado es del modo tan precipitado con el que se produjo el abandono de las dependencias de la Consejería de Industria por parte del equipo que mandaba Luis Soria. Quedará para los anales del ordeno y mando la movilización que llevaron a cabo la jefa de prensa y el jefe de gabinete del consejero, por entonces con los papeles invertidos por las continuas caídas en desgracia que sufría este último, víctima de otro síndrome de Estocolmo. La jefa de prensa llamó fuera de sí a una de las colaboradoras del consejero, que se encontraba almorzando en el restaurante Gambrinus aquel sábado, 14 de mayo (14-M, con perdón) con antiguos altos cargos de CC, incluyendo un ex consejero y dos directores generales. Eran las dos de la tarde, el principio de una atolondrada jornada, y hubo toque a rebato.