Le ganaron dos perfectos desconocidos

Los números son muy elocuentes, a la par que faltones. Jerónimo Saavedra, una autoridad de la política, con un nivel de notoriedad y un grado de conocimiento superior al de cualquier otro candidato a la alcaldía, se hundía el 22 de mayo en el fango de los peores resultados que se recuerdan después de los que obtuvo Franquis a finales de los noventa. Dos perfectos desconocidos por la ciudadanía, como sus compañeros Carolina Darias y José Miguel Pérez, que empezaron la campaña con un conocimiento del 5 y del 55%, respectivamente, ganaron en votos al que a priori aparecía como favorito a la alcaldía. Darias, candidata al Cabildo, sacó en Las Palmas de Gran Canaria 1.100 votos más que Saavedra; y José Miguel Pérez, candidato al Parlamento, superó los 2.100 de diferencia sobre el alcalde. Algo que no sucedió sin embargo con Juan José Cardona, que en la ciudad venció por unos pocos votos a José Miguel Bravo de Laguna, aunque perdió por unos 1.000 frente a José Manuel Soria, mucho más conocido que él. Las encuestas jamás alertaron al equipo de Saavedra acerca de un talegazo así, aunque la más optimista le otorgaba 12-13 concejales, pero los análisis cuantitativos debieron haberse tenido más en cuenta.