¡Pero si lo paga Fomento!

El Ministerio de Fomento está gafado en Las Palmas de Gran Canaria desde los tiempos en que Aznar recuperó esta denominación para el que antes era de Obras Públicas. En los tiempos del temperamental Álvarez Cascos, ni siquiera sus compañeros del PP tuvieron suerte, unas veces porque venía y les ponía los cuernos en las inauguraciones, y las más porque les tomaba el pelo con la financiación del teatro Pérez Galdós, que es en realidad de lo que queríamos hablarles. Tuvo que venir Zapatero con sus sablazos y su horrible marginación a Gran Canaria para que apareciera dinero para ese coliseo, cuyas obras ya han comenzado. Pero en el cerramiento que protege el edificio se pueden observar unas telas en las que se indica a las claras que la obra está financiada por el Ayuntamiento y el Cabildo. Pues va a ser que no, ellos no ponen ni un centavo. Lo paga el malvado Zapatero con fondos de Fomento, y encima ha ampliado las partidas a la caja escénica, que antes no lo habían previsto los mandamases del PP. Seguramente para no hacer cabrear a Cascos más de lo que ya estaba.