De presiones

Tiempos difíciles para el político, deberíamos afirmar. Pero no nos atrevemos por lo que pudiera ocurrir. Leemos por un lado a Adán Martín, vicepresidente del Gobierno y candidato casi seguro a subir un peldaño, que asegura que le tratan de presionar las grandes superficies a cuenta de los recortes de expansión que para ellas tiene reservada la nueva ley de comercio. Es gratificante contemplar los modos que tiene el mismo Gobierno de tratar el comercio, según sea en una comarca o en otra o en una isla o en la otra. Habrá que seguir con atención el pulso del vicepresidente, no vaya a ser que la tijera de recortar sólo sirva para casi todas las empresas. Viniendo de Martín, del que conocemos asuntos como el Aiem, muy inspirado por muy determinadas vías lácteas, es duro de tragar. Pero seguiremos atentos a la evolución del asunto.