Lo que queda por ver

Ya saben ustedes -y aquí lo hemos referido en alguna otra ocasión- que es sólo en el Reino Unido donde está prohibida la caza del zorro. En Canarias, no sabemos si por suerte o por desgracia, no hay zorros, pero existen partidas para darle caza. Se organizan en importantes despachos de la ciudad de Las Palmas. Ya tenemos localizados al menos dos, y no tienen por qué ser los mismos cazadores. Uno es el del señor Óliver Alonso, en Siete Palmas, y el otro el de Juan Manuel Freire, en el Puerto. Mientras, otros amigos de la flora y la fauna, como el señor Sánchez Rodríguez, desde Miller Bajo, aboga por aplicar aquí la legislación inglesa y dejar tranquilo al zorro. Una asociacion de carácter regenerador encabezada por Jaime Selgas dice lo mismo. Pero no habrá tregua y le sacarán lo de la operación de cirugía estética camuflada de accidente de tráfico y no se sabe qué cosas divinas y humanas. Se juega, lejos aún el rien ne va pas plus.