Con un reaccionario en Costas

Recordarán que por aquellas fechas, hace cuatro años, como decíamos, los ecofascistas se empeñaron en que no se podía meter en Amadores arena procedente de los fondos de la zona porque, sostenían, Maspalomas se iba a quedar sin este elemento característico. Contaron para sus cancaburradas con el apoyo de un reaccionario (Mauricio dixit) en la Dirección de Costas, más la ignorancia y el desconocimiento de una parte de la sociedad, que les jaleó por absurda simpatía. Cuatro años después, uno pisa la arena de Amadores y descubre que nada tiene que ver con la de las dunas de Maspalomas o con la de playa del Inglés, como estos decían. Meta usted los pies en esas playas y descubrirá que lo que realmente había detrás de aquel ecologismo de alfalfa era la ejecución de un encargo divino (entiéndase por divino que procedía de mandamases de arriba) para auspiciar determinadas ambiciones políticas. El Parlamento recomendó entonces, dadas las presiones, que no se extrajera arena de los fondos canarios. Un risueño Parlamento, por cierto, al que también cogieron literalmente agachado algunos intereses empresariales -con representantes concretos en la Cámara- que obtienen pingües beneficios de explotar arena que traen de un puerto de África. Ante este panorama y la experiencia adquirida, convendría que la Federación Norte y Sur pactara con el Este y el Oeste y no volviera a repetir el ridículo. Mientras, quedamos a la espera de la opinión del eje Copeyro-Orive, jefes de Costas en sus ratos libres. Les mantendremos informados.