Más recortes (de libertades)

No es que estén recortando gastos para obtener el ansiado déficit cero; ni les ha sobrevenido un ardor de miramiento por los dineros públicos. No, los recortes que provienen de la Alcaldía de Las Palmas de Gran Canaria se dirigen hacia libertades y derechos fundamentales, como el de la información. Medio de comunicación que se sale del carril, medio que se convierte en pieza a abatir. Está ocurriendo cada día sin que nos enteremos, hasta que pasan cerquita y es entonces cuando lo contamos. Ya les hemos acercado noticias de lo que ha ocurrido en torno al director de Antena 3 TV, al que han tratado de dar pasaporte por expeditivos métodos, pero hay más casos. A la emisora Onda Real de Las Palmas, que dirige la periodista Lali Sánchez, le han retirado la poca publicidad municipal que le llegaba por orden del Gabinete Técnico de la Alcaldía, que dirige el tal Larry Álvarez. Lo hacen, pura y sencillamente, porque no gustan las cosas que se dicen en esa radio ni las que se publican en la revista Anarda, que también dirige Lali Sánchez. Una vez desde la misma sexta planta pidieron su cabeza al principal accionista de esa revista por la publicación de una entrevista con Nardy Barrios. No tuvieron éxito. Pero ya la misma petición reviste tanta gravedad que debería contarse por parte de los protagonistas, más que nada para que no ocurra lo que dice el poeta Niemoller (con atribuciones a Brecht), “cuando vinieron por mí ya no había nadie para protestar”.