Las reprobaciones son para quien se las curra

Javier Abreu, el líder del PSC en La Laguna, es una de las piezas puestas en busca y captura por los escindidos del socialismo tinerfeño, agrupados en torno a Santiago Pérez, Nacho Viciana y José Manuel Corrales en Socialistas por Tenerife. Es, junto a otros históricos y menos históricos como Juan Carlos Alemán o Pepe Segura, las bestias pardas de esa escisión. Por eso bastó ver en Youtube el modo tan expeditivo y reprobable con que Abreu se despachó a los activistas pro saharauis en el mitin de Rubalcaba para que se les hiciera la boca agua y buscaran cualquier mecanismo para ponerlo en evidencia. De ahí que se promovieran, aún a sabiendas de su escaso recorrido, la fórmula de la reprobación ante el pleno del Ayuntamiento en el que Abreu es primer teniente de alcalde. Intento fallido desde el punto de vista administrativo porque solo es posible reprobar a alguien por acciones cometidas en el ejercicio de su cargo, y hacer de seguritas en un mitin no es precisamente una acción de gobierno. Pero la gente de XTF ya tenía bastante con el ruido mediático, que lo ha conseguido aún a costa de competir con la multa por conducir sin ITV que ha caido sobre Viciana, que niega la versión policial según la cual le perdonaron la multa por usar el teléfono móvil al volante.