Desde las 16.00, sólo música

Las emisiones convencionales de Radio El Día quedaron suspendidas desde este lunes a partir de las cuatro de la tarde, hora en la que comenzó a radiarse un bucle musical continuo a la espera de que don José, en el pasado bautizado por su estrecho colaborador Andrés Chaves como Pepito Apagabombillas, decide qué hacer con un medio de comunicación que ha castrado para tratar de arrojar a los pies de Paulino Rivero la responsabilidad de su cierre. Cuatro de los empleados de la radio tienen la opción de regresar a El Día, plantilla de la que seguían formando parte en una más que evidente irregularidad laboral cometida por ese dechado de virtudes que se llama don Pepito. Se trata de Sonia Chinea, Juanjo Ramos, Maleni Yanez y José Moreno. Este último, que ejercía como director de la emisora con el rango de subdirector (el máximo cargo también lo ocupaba Rodríguez Ramírez) tiene sobre la mesa la oferta de ser el redactor-jefe de la edición digital del periódico. No hemos podido localizarle para que nos indique cuál va a ser su decisión al respecto. Al parecer, la empresa lo ha mandado de vacaciones de manera inmediata. Los cuatro tendrán el inmenso placer de presenciar más de cerca cómo es la alfombra roja y cómo es el palio que cada día extienden bajo los pies y despliegan sobre la cabeza del magnánimo editor esos dos bufones que empuercan con sus mendaces aportaciones las ocurrencias delirantes de su jefe. Una página negra más de la historia de El Día se escribió este lunes. Desgraciadamente no será la última. Nuestra solidaridad y reconocimiento a sus profesionales, a los que se han tenido que marchar y a los que han decidido quedarse.