Los notarios reclaman “herramientas” para controlar la legalidad
El notario es un controlador de la legalidad lo que hace falta es que tenga herramientas para controlarla, ha dicho este miércoles el decano del Colegio de Notarios de Canarias, Alfonso Cavallé, durante la presentación del informe Observatorio notarial de la realidad socioeconómica de los canarios 2007-2014.
Recordó que el notario es un funcionario público y tiene independencia pero depende del Gobierno central, desde el que se establece hasta donde puede llegar la actuación de este colectivo e insistió en que los notarios reclaman “herramientas” con las que poder indagar y saber, entre otros actos, las condiciones de los contratos.
Alfonso Cavallé dijo que los notarios pueden opinar y así él cree que habría que legislar mejor, y en este aspecto señaló que el colectivo del que es decano en Canarias es como un árbitro, que basa su actuación en un reglamento.
A su juicio es evidente que hay instituciones a las que no interesa que actúen los notarios.
En cuanto a las herramientas que precisa explicó que para no autorizar la firma de un contrato es preciso que haya una sentencia del Tribunal Supremo o que esté en el registro de condiciones generales.
Alfonso Cavallé reiteró su petición de que se fortalezca la figura del notario, para lo que es necesario que haya voluntad por parte del legislador.
En cuanto al informe “Observatorio notarial de la realidad socioeconómica de los canarios 2007-2014”, Alfonso Cavallé cree que que hay cierto optimismo en los últimos meses y que hay algo más de actividad, pero reconoció que se trata de una percepción subjetiva.
En Canarias hay 98 notarios, de los que 47 están en la provincia de Santa Cruz de Tenerife y 51 en la de Las Palmas, y, según el citado informe en ese periodo el número de actos notariales ha pasado de 516.917 a 283.125.
Para Alfonso Cavallé ha sido llamativo el descenso en contratos traslativos sobre todo tipo de bienes y derechos, que han pasado de 62.220 a 31.756, así como en créditos, préstamos y garantías hipotecarias, con una bajada de 64.926 a 14.613, y en pólizas y otros documentos mercantiles sujetos al antiguo arancel de corredores, en el que el descenso ha sido de 146.858 a 62.489.
Los apoderamientos han descendido un 19% entre 2007 y 2014, mientras que en el apartado de testamentos ha aumentado el 4% el primero y el de renuncias a herencias ha subido el 260%.
