IUC denunciará en Bruselas los vertidos de aguas residuales de Emalsa

Izquierda Unida presentará esta semana varias denuncias en el Parlamento Europeo en contra de lo que consideran un “envenenamiento” de las aguas del litoral de Las Palmas de Gran Canaria. La formación ya denunció ante la Fiscalía en junio de 2013 que la empresa Emalsa vierte aguas residuales de forma continuada en la zona que transcurre entre el Teatro Pérez Galdós y el barrio de San Cristobal. Actualmente ya se encuentran imputados por este caso dos jefes de depuración de la empresa, Marcos Ortega y José Rodriguez, y la formación espera que “estas imputaciones vayan en aumento”.

Según el candidato a la alcaldía de Las Palmas de Gran Canaria por IUC Germán Santana, el problema radica en que la depuradora no es capaz de tratar a lo largo de todo un día y, en condiciones climatológicas normales, la emisión de estos residuos fecales. Además, señala que no se trata del único punto en el que se están produciendo estos vertidos y que el Ayuntamiento tiene una gran responsabilidad en el asunto, por no haber buscado una solución.

Estos residuos están generando un “envenenamiento contra el medio ambiente, los fondos marinos y la salud pública”, puntualiza Santana. El candidato recuerda que en esta zona se llevan a cabo actividades de pesca y que también se pone en peligro la imagen de Las Palmas de Gran Canaria “como una ciudad limpia”, que puede “dejar de recibir banderas azules” por este motivo.

Germán Santana, junto al candidato al Parlamento por Gran Canaria, Lorenzo Garzón, aseguran que se basan en diversos informes técnicos para hacer esta denuncia. Entre ellos, un estudio del Gobierno de Canarias y otros de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, del Seprona, que aporta recursos visuales, así como de informes toxicológicos de la Universidad de Sevilla.

Ambos exigen la dimisión del del Concejal de Aguas del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Martín Muñóz y apuestan por una remunicipalización de Emalsa. Santana aclara que a los vertidos residuales se le añaden los continuos e irregulares olores que afectan a diferentes barrios y que resurgen de manera constante.

Izquierda Unida también apunta que se ha incrementado el precio del agua en los últimos años, de manera que el de Las Palmas de Gran Canaria es el cuarto más alto de toda España, por detrás de ciudades como Cádiz, Alicante y Murcia.

Asimismo, advierten de que en la empresa se han “inflado facturas y servicios” y que se han producido derroches, como el alquiler de un edificio que no ha sido utilizado o retribuciones complementarias que han recibido gestores de Emalsa.

Santana considera que la privatización de la empresa sólo “ha conducido a una situación de catástrofe y caos” y que la rescisión del servicio a Emalsa debería ser a coste cero, pues “la empresa ha incumplido el contrato y no debería tener derecho a indemnización”, sentencia.