El Ayuntamiento de Santander rebaja entre un 20% y un 10% del IBI a 341 empresas, entre ellas Liberbank, Gran Casino y Tenis

El Ayuntamiento de Santander ha aprobado este viernes una relación de 341 empresas de todo tipo a las que se rebajará el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) entre un 20 y un 10% de la cuota íntegra como forma de contribuir a paliar la crisis económica derivada de la COVID-19. No obstante, la medida ha tenido el reparo de PSOE, Unidas por Santander y Vox, que han coincidido en abstener por una serie de consideraciones, entre ellas por incluirse en la relación a empresas de cirugía estética o entidades bancarias como Liberbank, entre otras. La merma de ingresos municipales por estas bonificaciones, ya contempladas en el presupuesto, es de 1,2 millones de euros.

Liberbank, que acaba de ser absorbido por Unicaja, y empresas como el Gran Casino del Sardinero, la Real Sociedad de Tenis y la propia se de Las Carolinas de la Asociación de Hostelería de Cantabria, verán reducido su IBI, junto a las empresas de ocio, espectáculos, culturales y de hostelería. La relación aprobada con los votos de PP, Cs y PRC, en estos últimos supuestos, supone una bonificación del 20%.

En el caso de sectores productivos, comercios y oficinas, la bonificación es del 10%. Aquí es donde cabe incluirse a empresas como academias, farmacias, inmobiliarias, grandes tenedores de locales de alquiler, cines, y casos como los de Teka Industrial y Cantabriasil. En la relación se incluyen firmas como Palacio del Mar, Gran Casino del Sardinero, Gran Hotel Vitoria, Liberbank, Fundación Bancaria Caja de Ahorro y Aparcamientos Ferry.

Los socialistas han basado su abstención a que los 1,2 millones que Santander deja de ingresar son equivalentes al Fondo de Emergencia Social, por lo que, según el portavoz Daniel Fernández, se podría haber duplicado la partida de este fondo destinado a las personas más vulnerables. Asimismo, Fernández, considera que la bonificación repercute de manera indistinta en los beneficiarios, tengan más o menos recursos.

El portavoz de UxS, Miguel Saro, ha considerado que el instrumento utilizado no es el más adecuado por la generalidad -“un cajón de sastre”, ha dicho-, y también ha expresado sus “dudas” porque en el listado de empresas “hay de todo”. “Algunos han sufrido la crisis más y otros menos pero no hay un criterio para decidirlo porque es genérico”, ha señalado.

En el caso de Vox, su concejal Guillermo Pérez-Cosío ha basado su abstención en que no se ha informado de los importes bonificados concretos de cada beneficiario y que no todos en el listado tienen la misma casuística.

Victoriano González Huergo, concejal de Hacienda, ha recordado que la medida ya fue aprobada, sin votos negativos, cuando se dio el visto bueno en octubre a las ordenanzas fiscales y que la bonificación que puedan tener un propietario de más de un local lo repercutirá en los inquilinos.

La alcaldesa de la ciudad, Gema Igual, ha justificado estas ayudas directas en su repercusión sobre el mantenimiento del empleo, indicando que, si en algunos casos no se conceden, el Ayuntamiento tendrá que acometer el gasto de atender a trabajadores que pierdan su empleo y acudan a los servicios sociales municipales. Asimismo, ha negado que la rebaja sea lineal porque es distinto el porcentaje aplicable entre sectores.

Por su parte, el portavoz de Ciudadanos, Javier Ceruti, ha manifestado que “una situación extraordinaria requiere medidas extraordinarias” como ésta, y “aunque todo es mejorable” y “se pueden haber incluido empresas que no necesiten tanto la ayuda, la gran mayoría” sí la precisan. “Hay que facilitar la vida a la empresa en una situación complicada”, ha señalado.

Los regionalistas, que en esta ocasión se han alineado con PP y Cs, han justificado su voto en que los efectos de la crisis son generales a toda la sociedad, la cual en su conjunto es “vulnerable”, si bien en distinto grado, y por lo tanto requiere ser apoyada. La concejala Amparo Coterillo ha dicho que “el apoyo al sector productivo es necesario”, sin caer en “maniqueísmos”, en el sentido de que las ayudas a uno se hagan en detrimento de otros.