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4.000 litros de leche... por 3,92 euros

Los productores alertan de los bajos precios de la leche y piden ayudas al sector a las instituciones.

Laro García

El precio de la leche y el fin de las cuotas lácteas han llevado al sector lácteo a una situación “insostenible”, que da lugar a anécdotas surrealistas. “No os lo vais a creer”, ha asegurado este lunes el secretario general de UGAM-COAG y ganadero de leche de Udalla, Gaspar Anabitarte, en rueda de prensa. La advertencia tenía un motivo fundado: una empresa llegó a pagar en mayo de este año 3,92 euros... por 4.000 litros de leche. Para los más incrédulos, el portavoz del sindicato ha mostrado una copia de la factura emitida para despejar las dudas.

Ante este panorama, los ganaderos cántabros han denunciado que la industria láctea está pagando “precios inaceptables” que están provocando una “catástrofe monumental”. Por eso, la organización agraria UGAM-COAG ha exigido que las instituciones cubran los costes de producción de los ganaderos de leche, una medida que, según calculan, tendría un coste en la comunidad autónoma en este año 2015 de tres millones de euros.

Hacen extensiva su reclamación a todas las administraciones públicas españolas implicadas, desde el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente a la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Biodiversidad del Gobierno de Cantabria. Anabitarte ha defendido que este coste es “asumible”, bien por el Gobierno de Cantabria, bien por el Gobierno de España o al 50%. “Ese dinero sería para pagar facturas, no para pagar los sueldos”, ha recalcado el líder sindical, que de no encontrar a complicidad del poder político pronostica “quiebras de entre 20.000 y 30.000 euros” por deudas a finales de este año.

Del mismo modo, ha planteado que la industria garantice la recogida del 100% de la leche producida por los ganaderos para “no dejarles a la deriva”, al tiempo que ha pedido una “unificación” de los precios que se pagan por la leche en polvo y por la leche líquida.

La propuesta de UGAM-COAG compromete a las distribuidoras, la industria, las cooperativas, las asociaciones de consumidores, las administraciones y los propios productores para establecer una red de seguridad que garantice que los ganaderos “en caída libre” tengan una red que evite su ruina y desaparición. En este sentido, ha confiado en que la Unión Europea tomará medidas y le ha pedido un nuevo sistema de gestión.

Al mismo tiempo, ha recordado la manifestación que habrá el próximo 7 de septiembre en Bruselas con “más de 7.000 ganaderos”. El sindicato ganadero cree que “sin presión” no se va a conseguir que se pongan en marcha estas medidas, por lo que espera poder sumarse a la movilización de ganaderos europeos con motivo del Consejo de Ministros de la Unión Europea.

“España es un despelote, un desmadre”

Durante su intervención, también ha dejado espacio para la autocrítica. De hecho, Anabitarte ha considerado que los ganaderos “no estamos transmitiendo bien el trabajo que se está haciendo” y ha denunciado que “España es un despelote, es un desmadre”, porque para luchar contra la deslocalización del sector, “media docena de ganaderías superan las 3.000 vacas, es una estrategia absurda”.

En este sentido, ha defendido que el problema “no es la deslocalización, sino los costes de producción”, que son “más bajos” en países como Francia, Alemania u Holanda, por lo que ha criticado la formación de “súperganaderías” para competir en Europa.

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