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Los socialistas cántabros deciden el futuro del PSOE en unas primarias inéditas en el partido

Pablo Zuloaga y Eva Díaz Tezanos, candidatos en las primarias del PSOE cántabro. | JOAQUÍN G. SASTRE

Laro García

Los socialistas cántabros se enfrentan este domingo a una encrucijada: tendrán que elegir entre la “estabilidad” y “continuidad” que defiende la actual secretaria general del PSOE en la comunidad autónoma, Eva Díaz Tezanos, o la “ola de ilusión” y “ganas de cambio” que representa el alcalde de Santa Cruz de Bezana, Pablo Zuloaga, que compite en las primarias por el liderazgo y el poder interno en la formación política bajo la vitola de ser el candidato 'sanchista'.

A priori, el aspirante parte ligeramente como favorito frente a la candidata que busca la reelección, que ve peligrar su cargo a pesar de controlar el aparato y ostentar el poder institucional en el Gobierno de Cantabria después de que su rival en este proceso se impusiera por un escaso margen en la recogida de avales, que demostró la alta movilización de la militancia y el interés por participar en una campaña que decidirá el futuro a corto plazo del partido.

Díaz Tezanos ha apurado las últimas horas en encuentros y charlas con los afiliados de Los Corrales de Buelna, además de presidir una merienda-cena con sus más allegados en Reocín, su municipio natal. En estos actos de cierre de campaña ha presentado las “muchas y buenas aportaciones” que han realizado los militantes a su hoja de ruta para los próximos cuatro años.

“Cada vez hay más gente interesada en nuestro proyecto. Nos hemos encontrado más apoyo cada día que ha pasado de campaña, hasta vernos desbordados en los últimos actos”, aseguran desde el equipo de Díaz Tezanos, que insiste en que el objetivo ha sido siempre “escuchar y debatir” con todos los miembros del partido.

A juicio de los más cercanos a la actual secretaria general, las primarias se resolverán por “un puñado de votos”, por lo que apelan a la participación y reconocen la “incertidumbre” que se cierne sobre el futuro del PSOE cántabro.

Las sensaciones, sin embargo, son bien distintas en el núcleo duro de la candidatura de Pablo Zuloaga: “Vamos a ganar, lo tenemos clarísimo”, se atreven a decir desde su equipo, que se muestra confiado en que la diferencia será “mucho más holgada” de lo que haría pensar la diferencia de 66 avales con la que arrancaron la campaña.

Hay algunas palabras que se repiten constantemente en sus mensajes, como las de “ilusión”, “cambio”, “recuperación” o “izquierda”. Zuloaga ha reiterado su intención de continuar la estela del 'renacido' Pedro Sánchez, al que apoyó firmemente durante su etapa más dura y del que se ha convertido en hombre fuerte en Cantabria.

La transparencia en el partido y en la actividad de los altos cargos del PSOE cántabro, la necesidad de formación continua tanto entre las bases como entre los dirigentes, la apertura hacia el exterior, la comarcalización de la estructura interna o una mejora en la comunicación son argumentos que han empleado ambos durante este largo proceso que toca a su fin.

El futuro del Gobierno

La campaña, a pesar de desarrollarse entre compañeros y no haber alcanzado la dura rivalidad de las primarias federales, por ejemplo, sí ha dejado algunos mensajes cruzados y acusaciones personales que pueden complicar el día después. Sobre todo, en la línea de atacar por “desleal” o “incumplir su palabra” a Zuloaga, al que desde el entorno de Díaz Tezanos culpan de “traicionar” el acuerdo para diseñar una lista unitaria que evitase el enfrentamiento en primarias.

Además, el pacto con el PRC de Miguel Ángel Revilla, que garantizó el 50% del Gobierno autonómico a los socialistas y permitió gobernar en un buen número de ayuntamientos, ha sido una arma arrojadiza a lo largo de toda la campaña. Díaz Tezanos y sus fieles han llegado a insinuar la posibilidad de una dimisión en bloque de todos los consejeros del PSOE en la caso de victoria de Zuloaga, o incluso la ruptura unilateral del acuerdo por parte de los regionalistas y la convocatoria anticipada de elecciones.

Sin embargo, el propio Zuloaga ha desmentido este extremo -también Revilla, en sus manifestaciones públicas, ha negado que el pacto esté en riesgo y ha alabado la democracia interna del PSOE- y ha defendido la continuidad del Gobierno de coalición, con la propia Díaz Tezanos como vicepresidenta y al frente de una macroconsejería que incluye las políticas sociales, el medio ambiente, el urbanismo o la investigación, entre otras cosas.

La última palabra la tienen los casi 2.900 militantes socialistas que están llamados a votar este domingo, y que decidirán cuál es el camino a seguir del partido desde ahora y hasta las elecciones autonómicas y municipales que se celebrarán en la primavera de 2019.

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