El Gobierno rechaza la posibilidad de prohibir la caza del lobo en Cantabria

El Ejecutivo autonómico tiene intención de mantener al lobo como especie cinegética y anuncia que el anteproyecto de reforma de la Ley de Caza de Cantabria que permitirá mantenerlo con este estatus legal y a la vez poder asumir los gastos por los daños que genere la especie en todo el territorio regional está en sus “últimos trámites” antes de llegar al Consejo de Gobierno para recibir luz verde y poder iniciar su tramitación parlamentaria.

Así lo ha anunciado este lunes el consejero de Medio Rural, Jesús Oria (PRC), en el Pleno del Parlamento de Cantabria, en una intervención en la que el responsable político de esta nueva normativa ha vuelto a explicar que esta modificación legislativa es un “paso previo” a la aprobación del Plan de Gestión del Lobo. Además, el consejero se ha comprometido a llevar este documento a comisión parlamentaria antes de aprobarlo, algo que, según había anunciado ya el Ejecutivo, se hará por decreto.

El consejero ha dado estas explicaciones en el Pleno en respuesta a una interpelación de Podemos para conocer si, finalmente, el Gobierno de Cantabria (PRC-PSOE) iba a mantener al lobo como especie cinegética o no tras los, a juicio de la formación morada, “sorpresivos cambios de rumbo” del Ejecutivo.

La portavoz parlamentaria de Podemos, Verónica Ordóñez, ha recordado que a inicios de legislatura, y durante la negociación del Plan de Gestión del Lobo entre la Consejería, cazadores, conservacionistas y ganaderos, se planteó modificar el estatus legal del lobo, convirtiéndolo en especie no cinegética, lo que no permitiría que pudiera ser objeto de caza deportiva.

En esos momentos, el Gobierno argumentó que, con la actual Ley de Caza, este cambio de estatus era la “única opción” para que el Gobierno pudiera asumir el pago de todas las indemnizaciones por daños y no solo aquellas que se producen dentro del Coto y la Reserva Regional de Caza.

Este planteamiento fue recogido en el proyecto de Plan de Gestión del Lobo elaborado por el departamento de Oria con participación de conservacionistas, ganaderos y cazadores, y que salió a información pública el año pasado, si bien en abril de 2017 la Consejería anunció que finalmente el lobo seguiría siendo especie cinegética tras “haber encontrado la fórmula legal para que el lobo siga siendo especie cinegética y, a la vez, poder hacerse cargo de todas las indemnizaciones por los daños de especie”, que era modificando la Ley de Caza.

A juicio de Podemos, esto supuso un “sorpresivo cambio de rumbo unilateral” que “dinamitaba” y “contravenía” el acuerdo “histórico” conseguido en la Mesa del Lobo. Además, Ordóñez ha recordado que, en junio de 2018, los grupos del Gobierno -PRC y PSOE- aprobaron una propuesta de resolución de Podemos en el Debate del Estado de la Autonomía en la que se hablaba del lobo como especie no cinegética.

Así, le ha preguntado si esta postura era una rectificación de la Consejería y una vuelta a la postura inicial o un error a la hora de votar dicha propuesta. “No sabemos qué es lo que va a hacer con el lobo”, ha ironizado Ordóñez, que ha defendido que la gestión y control de esta especie no debe hacerse a través de la caza.

Tras la exposición de la diputada de la formación morada, el consejero ha negado que por parte de su departamento haya habido “sorpresivos” cambios de rumbo y de forma “unilateral” y ha aludido a criterios de “seguridad jurídica” y “viabilidad técnica”. Así, ha confirmado que el Gobierno tiene intención de mantener al lobo como especie cinegética.

Informes contrarios

A principios de año, a nivel nacional, el debate se centró en el hecho de que “cazar cada vez más lobos no sirve para amortiguar los daños que la especie pudiera provocar a la ganadería”. A pesar de los planes que el Gobierno de Rajoy manejaba desde 2012 para desproteger esta especie –presentados regularmente a asociaciones ganaderas por los ministros de Agricultura Arias Cañete y García Tejerina–, la matanza de ejemplares es “inefectiva” e incluso “contraproducente” para reducir los ataques, según un estudio publicado a petición del Parlamento Europeo.

Aunque los ataques de lobos al ganado suponen pérdidas ínfimas a la cabaña general en España y en Europa, el método favorito de los gobiernos para abordar este tema es la eliminación de ejemplares: en 7 de los 10 estados de la UE con poblaciones, la gestión del lobo se basa en la caza.

España está en la punta de lanza ya que, en cuanto ha habido oportunidad, el Gobierno ha expresado su deseo de ampliar esta práctica y desproteger a la especie en los territorios donde no puede abatirse.