El BOC publica el Plan de Gestión del Lobo, que entra en vigor mañana

El plan establece las directrices, medidas y actuaciones para conservar y gestionar las poblaciones de lobo en todo el territorio de Cantabria, asegurando su compatibilidad con el desarrollo socioeconómico del medio rural en general, y especialmente de la ganadería extensiva.

La orden publicada hoy señala que la conservación del lobo en Cantabria requiere la seguridad jurídica que le otorga un marco normativo específico que considere los aspectos biológicos, ecológicos y sociales, basado en conocimientos científicos y técnicos, y en una gestión adaptativa que responda adecuadamente a la evolución de la especie y su entorno.

Asimismo, pretende que los daños que el lobo produzca en la ganadería extensiva no hagan inviable, o condicionen de manera relevante, su mantenimiento y mejora en la región, considerando que se trata de una actividad económica “clave” para las zonas rurales.

El plan considera al control de ejemplares de lobo como “una herramienta más para conseguir sus objetivos y nunca como un fin en sí mismo”, formando parte de un conjunto de medidas que van desde la compensación de los perjuicios causados en las explotaciones ganaderas, la aplicación de medidas preventivas de los daños, el reconocimiento de los servicios ambientales que presta la ganadería extensiva, y el fomento de un cambio en la percepción del lobo por parte del conjunto de la ciudadanía que minimice el “conflicto social y elimine la crispación del escenario de gestión de la especie”.

El Plan de Gestión del Lobo en Cantabria tiene una vigencia indefinida, si bien su aplicación será objeto de un seguimiento permanente. No obstante, transcurridos cinco años desde su entrada en vigor, y posteriormente cada cinco años, será sometido a una revisión general.

Establece que la Administración de Cantabria indemnizará los daños causados por la especie en todo el territorio regional.

También contempla un régimen de infracciones y sanciones, que será el establecido en la Ley de Cantabria de Caza.

En 2018, se estima en 15 el número mínimo de grupos familiares de lobos con presencia en la región.