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Cantabria registró en el primer trimestre de 2022 el mayor número de accidentes laborales desde hace más de una década

Imagen de una trabajadora en una fábrica de motores.

Rubén Alonso

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El primer trimestre de 2022 ha sido aciago en lo que a accidentes laborales se refiere. Según datos del Instituto Cántabro de Estadística (ICANE), durante ese periodo de tiempo se produjeron 4.292, una cifra que no se alcanzaba desde 2011, cuando fueron 4.274. Desde entonces ningún primer trimestre de año había llegado a los 4.000, siendo 3.335 en 2021, 3.611 en 2020 y 3.825 en 2019, haciendo un repaso por los últimos ejercicios.

De los más de 4.000 accidentes laborales, 2.477 fueron con baja y 1.815 sin ella. Ningún año desde 2008, cuando en el primer trimestre fueron 2.887, se habían dado tantos con baja laboral, mientras que los 1.800 sin ella están en la media de la última década tal y como se desprende de los datos publicados este jueves.

Por grupos de edad, el número de accidentes que requirieron de baja laboral crece a medida que aumenta la edad de los trabajadores, de forma que entre los 55 y 64 años se registró la cifra más alta con 472 de los 2.477 del primer trimestre de 2022. La realidad es que ese grupo de edad acumula el mayor número de siniestros laborales de cada periodo anual desde que hay datos (2007), salvo escasas excepciones.

No obstante, la gran mayoría de esos accidentes fueron leves, concretamente 2.459, según recoge el ICANE, de manera que 17 fueron graves y uno terminó en fallecimiento. Precisamente este miércoles se ha producido el segundo siniestro laboral mortal en la comunidad, en la fábrica Gamesa Electric de Reinosa.

Su comité de empresa ha convocado un paro de 24 horas de la actividad hasta las 22.00 horas de este jueves y los sindicatos CCOO y UGT han guardado un minuto de silencio frente a sus sedes de Santander, también en señal de duelo por la víctima.

Durante la concentración, la secretaria de Salud Laboral de Comisiones Obreras, Laura Lombilla, y el responsable de Salud Laboral de UGT, Martín Calonge, han lamentado el accidente y han vuelto a denunciar que “las cifras de accidentes laborales son insostenibles y su aumento en Cantabria y en el resto del país son una lacra”. En esta comunidad autónoma, la siniestralidad laboral ya ha sesgado dos vidas en lo que va de 2022, señalan ambas formaciones sindicales en un comunicado.

“Los accidentes mortales sesgan vidas y rompen todo el sistema social y el resto de accidentes graves, que también están subiendo muchísimo, así como muchas otras enfermedades no reconocidas como profesionales, sumergen a las personas en una precariedad tremenda”, ha advertido Calonge.

Por su parte, Lombilla ha alertado de que los trabajadores “estamos sufriendo un retroceso en la salud laboral en las empresas y vemos que la situación se puede complicar porque los números no paran de aumentar”.

En este sentido, el portavoz de UGT ha reivindicado “volver al espíritu del 95, cuando se publicó la Ley de Prevención de Riesgos, y hacer una esfuerzo para volver a meter la cultura preventiva en la gestión de las empresas de manera literal, real y efectiva”.

“Las empresas tienen que cumplir estrictamente la Ley; estamos observando un retroceso importante en su cumplimiento y abusos que hacía muchos años que no se producían”, ha denunciado la responsable de CCOO, que ha insistido en que “las empresas tienen que ponerse las pilas porque esto es una cuestión de vidas humanas”

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