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Ecologistas denuncia que los cazadores prohíben usar una ruta pública en Cabañeros

Cierre camino en Parque Nacional en Cabañeros

elDiarioclm.es

Un cartel en el Parque Nacional de Cabañeros cerraba un camino público, bajo la advertencia “Atención peligro. Prohibido el paso. Se está cazando con arma larga o rifle en toda la finca del 1 del 4 al 31-7-2017”. Esta “desagradable sorpresa”, como lo ha definido Ecologistas en Acción, se encuentra en el área de “influencia socioeconómica” del Parque.

El colectivo afirma que son los gestores del coto de caza por el que atraviesa la ruta desde la localidad toledana de Hontanar a Los Porches y al Collado de la Madroña los que han instalado los letreros. No es la primera vez que pasa, sino que, de forma reciente, también se “conminó” a los vecinos del municipio de Navahermosa de no hacer uso de los caminos públicos por la amenaza del peligro que ofrecía la caza.

La asociación señala, además, que en el caso de Hontanar, se trata de recechos de corzo y “seguramente” también de aguardos de jabalí. En el caso de estos últimos, aseguran que la consejería de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural pretende autorizarlos en la nueva orden de vedas para el periodo de abril a julio. Por otro lado, recuerdan que el ayuntamiento en cuestión recibió cerca de 40.000 euros en ayudas para acondicionar la ruta que se encuentra ahora cerrada.

Ecologistas en Acción asegura que se hace “eco” de las llamadas de “varias personas” cuyos planes de pase se han visto “frustrados” en el Parque Nacional. Además, afirman que se están dirigiendo escritos tanto al ayuntamiento como a la Consejería de Agricultura y al Parque Nacional para que “de inmediato” se retiren los carteles y se abra expediente sancionador al coto. Por otro lado, solicitan que se suspenda la caza en la zona, ya que es “obvio” que el uso de rifles en esta zona y época del año es peligrosa para las personas.

El colectivo quiere recordar también que no se puede prohibir el uso de caminos públicos por motivos cinegéticos y que la normativa señala que los cazadores deben respetar una zona de seguridad de 50 metros de ancho. “Hay que destacar que éste no es un caso aislado, ya que hay más situaciones en las que los cazadores o los ayuntamientos que los amparan prohíben o intentar coartar el paso de senderistas y ciclistas por rutas señalizadas o caminos públicos”, explican.

Finalmente, concluyen que las acciones se permiten debido a la “falta de vigilancia” de las autoridades y en la “permisividad cada vez mayor” de la consejería. Por eso, reclaman que la caza de corzo, aguardos de jabalí o el control con escopeta del conejo van a acabar dando un “disgusto serio” a quienes no cazan. “De momento ya están perjudicando al turismo de naturaleza, dañando la biodiversidad y generando una muy mala imagen de los espacios naturales de Castilla-La Mancha”.

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