Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

Arrels entra en campaña

Un hombre pide dinero en la calle

Cristina Palomar

La fundación Arrels está repartiendo esta semana miles de folletos para que los electores evalúen si los partidos políticos que se presentan a las elecciones en Barcelona tienen en cuenta la problemática de las personas sin casa en sus propuestas programáticas. “Queremos gobiernos que trabajen para hacer posible #nadiedurmiendoenlacalle, y es responsabilidad de todos”, asegura Arrels en su campaña. Y es que según la ONG, unas 3.000 personas no tienen casa en Barcelona, una cifra que en el caso de Cataluña se dispara hasta las 14.600. Si hablamos de gente que vive en las calles de la capital catalana, la cifra se sitúa en unas 900 personas, 300 de la cuales están cronificadas.

Las instrucciones de uso son muy fáciles. Solamente hay que escuchar los mensajes políticos referidas a aspectos sociales y compararlos con los conceptos más relevantes relacionados con la gente que duerme en la calle que aparecen en una parrilla que ha confeccionado Arrels y que incluye a las siete formaciones políticas que se presentan a las elecciones del 24M. Cada vez que los candidatos utilicen en sus discursos expresiones como derecho a la vivienda, exclusión social, vivienda pública, Housing First, pobreza, recuento, renta garantizada, sin techo, trabajo protegido o vivir en la calle, se tiene que marcar una cruz en la casilla correspondiente.

En paralelo a los programas de los partidos y a su compromiso social, Arrels ha confeccionado sus propias propuestas para las elecciones municipales con el objetivo de situar el olvidado drama de la gente sin techo en la agenda política. Entre estas, destacan la creación de espacios de acogida de muy baja exigencia, o lo que es lo mismo, sin normas rígidas como la obligación de ducharse o cumplir unos horarios muy estrictos. El ejemplo a seguir es el de Estocolmo, dónde se garantiza una cama antes de medianoche y se priorizan los centros de baja exigencia para las personas que llevan más tiempo viviendo y durmiendo a la intemperie.

Arrels también propone potenciar la vivienda social a un precio asequible y facilitar el acceso prioritario a la gente que más tiempo lleva en la calle. También defiende la necesidad de establecer una renda mínima de 664 euros al mes al considerarla la cantidad mínima “que permite vivir con dignidad”. Mientras que en Cataluña se invierte el 0,5% del PIB en vivienda, en el resto de la Unión Europea este porcentaje llega al 2% de media. Dublín i Múnich son dos de las ciudades que han optado por priorizar la vivienda social a largo plazo.

Como tercer eje de propuestas, la fundación destaca la necesidad de efectuar recuentos anuales para saber cuántas personas siguen viviendo en la calle. En Inglaterra, más de 300 gobiernos locales se coordinan cada año para hacer los recuentos en sus municipios y en España también existen iniciativas parecidas en Madrid, Sevilla, Zaragoza y Euskadi. Precisamente, Arrels ha organizado para el próximo martes 26 de mayo un recuento nocturno y está buscando voluntarios.

Etiquetas
stats